9 de octubre 2024 - 16:11

El rumbo de la economía, la salida del cepo cambiario y la oportunidad del crédito

Pablo Luna, de Banco Credicoop, y Javier Timerman, del Grupo Financiero Adcap, participaron del primer panel de Ámbito Debate sobre Finanzas & Inversiones en la era Milei

Con moderación de Julián Guarino, del primer panel participaron Pablo Luna, gerente de Finanzas de Banco Credicoop; y Javier Timerman, director del Grupo Financiero Adcap.

Con moderación de Julián Guarino, del primer panel participaron Pablo Luna, gerente de Finanzas de Banco Credicoop; y Javier Timerman, director del Grupo Financiero Adcap.

Pablo Luna, gerente de Finanzas de Banco Credicoop; y Javier Timerman, director del Grupo Financiero Adcap, fueron parte del primer panel de Ámbito Debate sobre Finanzas & Inversiones en la era Milei.

Moderado por el director de Ámbito, Julián Guarino, la conversación giró en torno al rumbo de la economía argentina, la posibilidad del crédito y las inversiones en el mercado de capitales, así como la importancia de la salida del cepo cambiario.

Al iniciar la charla, Timerman puso el foco en que 2024 “fue un año positivo para el inversor, pero también un año de mucha incertidumbre”, mientras agregó: “Fue muy difícil de predecir lo que terminó pasando. Si arrancábamos el 1 de enero y analizábamos algunas variables como nivel de reservas y el crawling peg de 2%, hubiéramos pensado que llegábamos a fin de año de otra manera”.

“Sin embargo, tenemos cierta calma cambiaria; un mercado de deuda que hoy está en los mejores niveles en lo que va del año y de hace bastante; una confianza por parte del inversor en general sobre los activos argentinos; y tenemos al Banco Galicia emitiendo por debajo del 8%. Son señales de que el mercado de capitales se está ordenando y es positivo”, contrapuso.

No obstante, admitió que “los inversores tienen que pensar que puede salir mal y medir cuáles son las consecuencias de eso”, por lo que comparó: “Todos usamos como termómetro lo que pasó en 2019, con un gobierno que gustaba al mercado, que hablaba de volver a emitir o soñaba con la Argentina con Investment Grade, había hecho la reunión del G20 y vinieron presidentes. Se podía pensar que la Argentina iba rumbo a un modelo diferente. Sin embargo, ocurren inesperadamente para el mercado los eventos de las PASO y el mercado cae 70%. Eso va a estar siempre en la memoria de los inversores y pone un freno al potencial upside”.

Menor volatilidad y aparición de tensiones

A su turno, Luna coincidió en que “estamos objetivamente en una mejor situación en cuanto a volatilidad y variabilidad” y enfatizó: “La experiencia no es hablar de otra sociedad, sino de nosotros mismos unos años atrás. Aunque esto no nos garantiza que no haya tropiezos por delante”.

“Fue un año complejo, arrancamos con una volatilidad mensual de precios, subiendo al 20% en enero y hoy está en niveles de 4 o 3,5%. Pareciera en una primera lectura que estamos mejor. Hay condiciones, aparece alguna demanda de nuestros activos que cotizan, los bonos suben y eso también es positivo. En algunas cosas estamos en una situación en la que pareciéramos ir encauzando”, observó.

timerman.jpg
Javier Timerman.

Javier Timerman.

Y admitió: “Hay que ver qué tensiones se siguen generando y qué se mantiene en cuanto al equilibrio logrado para proyectarlo por delante. Comenzamos a hablar de nuevo con preocupación del ritmo de evolución de la paridad cambiaria versus precios internos y aparecen tensiones”.

“La cuestión de las restricciones que habilitaría la entrada de capitales sobre todo a la inversión directa y la economía real, que es donde tenemos más mirada en el banco. Todo eso no aparece todavía tan claro y contundente. Hay sectores que van logrando mejores niveles de actividad que meses atrás, pero todavía es muy selectivo y focalizado. Hay que ver si eso es una tendencia y llega a otros que se vinculan al mercado interno. Son desafíos que no están resueltos”, alertó.

Un mercado de capitales al alza y los riesgos hacia adelante

Timerman destacó además la mejora del mercado de capitales y consideró que “es un fenómeno interesante porque no se ha vivido en otros momentos”, al señalar: “Era impensado pensar que los bonos provinciales iban a rendir menos que el bono soberano. Uno siempre pensó que si la Argentina defaultea a nivel nacional, provincias y empresas también. Eso no se dio en el último default argentino y aumentó mucho la credibilidad de esos sectores, porque se mostró que son empresas capacitadas para competir y atraer inversiones, que durante estos años hicieron ese ajuste que hoy se exige la nación”.

“Eso es positivo, pero no es algo que se pueda mantener en el tiempo. Es muy difícil cuando uno busca atraer inversiones tener un riesgo país y que los bonos argentinos rindan 20%. Van a decir ‘cómo invierto en un país donde su deuda rinde 20%’. Eso se está desmitificando”, resaltó.

Sobre los pronósticos de los economistas, consideró que “hoy se dividen en tercios: los que creen que Argentina necesita devaluar, los que hablan de liberar el cepo y los que dicen que no hay que hacer nada y mantener todo como está”. “No es que son malos o buenos, sino que no pueden entender cómo va a reaccionar la gente y piensan de manera diferente, que me parece bien porque realmente no se sabe”, analizó.

“El gobierno está apostando a mantener las políticas y eso demuestra lo difícil que es invertir en Argentina. Tenés dos temas muy difíciles de pricear. Argentina viene de un pozo de credibilidad y eso tarda mucho tiempo en revertirse. Es difícil saber si el mercado les va a dar tiempo a las políticas acertadas o no del gobierno”, abundó.

pablo luna.jpg
Pablo Luna.

Pablo Luna.

El referente de Adcap sostuvo que “muchos creen que va a depender de la acumulación de reservas o si el tipo de cambio está atrasado o no”, pero se diferenció de esa mirada. “Creo que el beneficio de la duda por parte del mercado va a depender de la política, no de las reservas. Si mañana vemos que Cristina Fernández de Kirchner tiene un 60% de aprobación, el esquema de estabilidad se cae. El riesgo hoy viene por el lado de la política y no necesariamente de variables económicas, sobre lo cual es difícil predecir reacción y temporalidad”.

La importancia del crédito, en alza desde un piso bajo

Con respecto a la importancia del crédito, Luna consideró que es un aspecto “fundamental sobre la actividad económica en cualquier lugar” y lamentó que existe “un subdesarrollo de la economía que es impropio en esta etapa”.

“Tenemos un objetivo de que, sobre el total de lo que producimos, un equivalente al 10% esté en términos agregados apalancado en préstamos. Es bajo, pero hoy sería una gloria para nosotros”, admitió al revelar que “en abril tocamos un piso el sistema financiero financiando el producto en términos del 4,5% y hoy, después de 5 meses de crecimiento sostenido, estamos en 5,9% en préstamos tanto a personas como empresas”.

En esa línea, destacó “el proceso virtuoso” que supone “el pasaje de ahorros colocados en el Estado a la economía real” y señaló que “hay muchísimo para andar”, para luego destacar: “Aparecen señales como el blanqueo, la exteriorización de activos. Argentina tiene mucha riqueza, hay empresas que son muy valoradas por el mercado aún en contextos donde no están muy claras las reglas de funcionamiento. Creo que el crédito apalancando a la economía tiene para aportar, puede haber una veta”.

Cuánto influye la dependencia del dólar

Por otra parte, Timerman consideró que cortar la dependencia del dólar “es algo que debería pasar si queremos ser un país más normal donde se piensen inversiones desde el punto de vista de la inversión propia y no del riesgo país o riesgo externo”.

“Hay países que tienen mucha volatilidad en el tipo de cambio, como Colombia por ejemplo. Sin embargo, no es un problema el tipo de cambio. El colombiano piensa en pesos colombianos y el inversor también. Argentina debería tender a normalizar esta obsesión respecto al dólar”, comparó y aventuró: “Si empiezan a llegar inversiones y Argentina empieza a ser parte de los mercados globales de una manera más normal y eficiente, creo que los argentinos van a empezar un poco a pensar que el dólar no es el único refugio, que de hecho muchas veces no lo fue respecto a papeles en pesos”.

A la par, consideró que “el mercado de capitales argentinos se está desarrollando de manera bastante sorprendente”, al indicar que “hay países que tienen mucho mejor crédito y no tienen un mercado tan desarrollado”.

“Hoy hace varios años se viene desarrollando un mercado entre privados, de préstamos, pagarés y cheques que está creciendo muchísimo y a mí me sorprende. Creo que de ahí va a venir mucho del crecimiento y de este incremento en el crédito que se habla viene por este desarrollo en el mercado de capitales local. El crédito va a venir de los locales más que desde afuera”, anticipó.

La oferta de los bancos a los ahorristas

En tanto, Luna resaltó que existe “una respuesta o crecimiento conjunto en ir expandiendo la oferta y el vehículo donde se lleva el ahorro” y afirmó que “el producto tradicional son los depósitos en los bancos a plazo fijo para lo que es el ahorro”.

No obstante, dijo que “es una visión que se va superando y se va complementando con productos como el crecimiento de la actividad de los fondos comunes, con inversores que eligen un tipo de fondo u otro, ya que se puede ahorrar en fondos o acciones , bonos de determinado tipo, con CER, que ajustan a corto o a largo plazo”.

“Las novedades van con mucho dinamismo en la actividad de fondos comunes y los bancos estamos dando respuesta. Son pasos que se van dando en la cultura financiera de ir incorporando herramientas”, destacó y aclaró que “el inversor decide cuál va a ser el fondo o la clase de activo elegida en una decisión que está bueno que se revise todo el tiempo”.

La salida del cepo cambiario

Finalmente, Timerman se refirió al cepo cambiario y advirtió: “En algún momento se va abrir y ahí se verá. Es muy difícil evaluar una economía encepada, medir una inversión, la cantidad de reservas que necesitás, la tasa de interés que necesitás, la actividad económica real. El país se tiene que normalizar”.

No obstante, consideró que “es difícil predecir cuando el gobierno va a salir del cepo cambiario analizando variables macroeconómicas únicamente” y sostuvo que el gobierno “cree que es una decisión sumamente importante y tiene una sola bala, que no pueden equivocarse con esa decisión porque vendría de la parte de inestabilidad del mercado”.

En esa línea, admitió que la salida del cepo “es una especie de obsesión” y analizó: “Conociendo la mentalidad de las personas que están en el Ministerio de Economía, van a querer blindarse de la mejor manera posible. Va a depender de cómo evolucione el mercado y qué tipo de acuerdo se logre con el FMI, que es crucial para la apertura del cepo”.

“Cuando haya plata fresca, acuerdo con el FMI, algo de plata de organismos multilaterales, un acuerdo con bancos y contracción del riesgo país, manteniendo este status quo de apriete fiscal y monetario, eso le va a dar más herramientas al gobierno para tener más munición cuando abra el cepo”, indicó.

Y graficó: “Es muy difícil predecir la reacción del mercado. Hoy una empresa que tiene 200 o 300 millones de dólares en pesos, que iban a ser para pagar dividendos o créditos intercompany, cuando se abra el cepo va a haber un llamado para preguntar qué hacer. El accionista de afuera puede decir ‘traémelos ya’ o ‘me gustó la reacción, invertilos’. Nadie sabe la respuesta”.

Dejá tu comentario

Te puede interesar