El nuevo récord mundial de velocidad máxima para un coche descapotable es de 453,91 km/h. Fue logrado ayer en las instalaciones de pista de ATP Automotive Testing Papenburg GmbH, Alemania, y marca un hito en la historia de Bugatti y del automóvil.
Un Bugatti rompió el récord de velocidad para un descapotable: 453 km/h
La emblemática marca alcanzó otro hito para un vehículo de estas características. También mostró otros modelos que habían alcanzado ese logro en otros momentos.
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Al final de su increíble carrera, el W16 Mistral, regresó a boxes con el importante logro.
Pero antes de terminar el día histórico, el W16 Mistral regresó a la pista, uniéndose a sus tres antepasados que establecieron récords mundiales en otros momentos en la historia de Bugatti.
Juntos, los cuatro autos representan la esencia más pura de la innovación, mostrando no sólo la evolución de la maquinaria Bugatti, sino también los límites cada vez mayores de las posibilidades de la ingeniería y un dominio cada vez mayor del rendimiento absoluto.
El Veyron 16.4 Super Sport World Record Edition; Veyron 16.4 Grand Sport Vitesse Edición récord mundial; Quirón Super Sport 300+²; y ahora el W16 Mistral World Record Car.
Todos han desempeñado un papel único a la hora de forjar su lugar y el incomparable legado de Bugatti en la historia del automóvil.
Basándose en una hermosa e intrincada historia de elegancia y gracia incomparables que se remonta a principios del siglo XX, Bugatti iba a entrar en un nuevo mundo, uno definido por una búsqueda de rendimiento sin precedentes. Es una historia que se puso en marcha a principios de década, en junio de 2010, con un logro que redefinió la percepción mundial de la velocidad.
Un Bugatti rompió el récord de velocidad para un descapotable: 453 km/h
En el campo de pruebas de Ehra-Lessien en Alemania, el escenario estaba preparado para que el Veyron 16.4 Super Sport World Record Edition marcara el comienzo de una nueva década de creación de Bugatti con una declaración de intenciones incomparable.
Para el primer Piloto Oficial de Bugatti, Pierre-Henri Raphanel, fue un día para aprovechar su rica experiencia en deportes de motor y conducción de alto rendimiento, asumiendo los controles de un vehículo único imbuido de la potencia de una versión modificada de 1.200 CV del Veyron. Con cuatro turbocompresores mejorados e intercoolers más grandes, el chasis del Veyron 16.4 Super Sport también se rediseñó integralmente, preparado para consolidar su impacto en el mundo del automóvil.
El logro de los mejores ingenieros de Bugatti quedó demostrado con la vertiginosa carrera de Pierre-Henri que batió el récord mundial, en la que alcanzó una velocidad sin precedentes de 431,07 km/h.
Fue un logro al otorgar a los primeros cinco Super Sports de producción su propia serie especial, las World Record Editions, con la misma configuración que el vehículo que estableció récords y permitiendo a los clientes de Bugatti experimentar el espíritu de esfuerzo que los creó.
Estos récords de velocidad máxima no eran exclusivos de los vehículos con cabina cerrada. Manteniéndose fiel a su espíritu de invención, en 2013 Bugatti transfirió su exquisita experiencia en ingeniería a los vehículos descapotables.
Basado en la plataforma Veyron Super Sport, el resultado fue el Veyron 16.4 Grand Sport Vitesse World Record Edition.
El empresario chino y apasionado piloto de carreras, Anthony Liu, llevaría la impresionante máquina a los terrenos sagrados de Ehra-Lessien, con la firme determinación de mostrar las alturas a las que una ingeniería podía llevar una experiencia de conducción elemental.
El Chiron Super Sport 300+ era la máquina que, desde las ruedas hacia arriba, había sido diseñada minuciosamente para realizar esa inmensa hazaña. El motor turbo de 8,0 litros y 1.600 CV equipado con un sistema de gestión térmica mejorado representaba el epítome de la icónica obra maestra del W16 de Bugatti.
La carrocería extendida "longtail", hecha a medida para el modelo, aseguró una mayor eficiencia aerodinámica, reduciendo la pérdida aerodinámica en un 40%.
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