No fue por la hinchada ni por el árbitro: ¿cómo Boca logró jugar con 12 jugadores en un partido?

Un amistoso en Guatemala se convirtió en un curioso encuentro cuando Boca, por una insólita razón, disputó el partido con un jugador extra.

El triunfo de Boca en Guatemala quedó marcado por una jugada fuera de lo común que nadie esperaba.

En la extensa historia de Boca Juniors, existen algunos episodios que se atreven a desafiar a la lógica. Uno de los más sorprendentes ocurrió el 27 de enero de 1982, cuando el equipo jugó un amistoso en Guatemala contra el club Comunicaciones y se presentó con 12 integrantes en el campo. El error no fue de los futbolistas ni de la hinchada, sino del árbitro que no advirtió la presencia de un jugador de más en el conjunto xeneize.

Este incidente se dio al cierre de una gira internacional y quedó registrado como uno de los momentos más insólitos en la historia del fútbol. La confusión no evitó que la institución del barrio de La Boca ganara el partido, pero sí dejó una huella que perduraría por años.

El día en el que Boca jugó con 12 jugadores

En el marco de una gira internacional que incluyó paradas en Estados Unidos, Malasia, Japón, México y Guatemala, Boca Juniors enfrentó a Comunicaciones en un amistoso que se jugó en el Estadio Nacional de la capital guatemalteca. El Xeneize, bajo la dirección interina de Luis Carniglia, había viajado por todo el mundo para jugar ante las grandes multitudes, entre ellas, la que se congregó en ese país centroamericano para ver a Diego Maradona. La situación que dio pie al episodio insólito fue que el árbitro, Danilo Ardón, no se percató de que el conjunto argentino ingresó al terreno de juego con un jugador de más.

El error fue tan evidente que Ardón luego fue suspendido brevemente por la federación local. En cuanto a la identidad del futbolista extra, las crónicas de la época tienen diversas versiones, aunque algunas señalan que fue Miguel Ángel Brindisi quien no debía estar en el campo en ese momento. Aunque no hay consenso sobre el instante exacto de la incidencia, algunos aseguran que fue solo en la segunda mitad, mientras que otros afirman que el conjunto jugó todo el encuentro con el hombre de más.

La victoria de Boca en ese partido por 1-0 no se vio empañada por el error del árbitro, ya que el gol lo había marcado Diego Maradona, quien con un zurdazo cruzado a los 22 años selló el triunfo en el amistoso. En aquel entonces, "Pelusa" estaba por concentrarse con la selección argentina para el Mundial de 1982, antes de continuar su carrera en Barcelona.

Este episodio quedó como un testimonio único en la historia del club, siendo una muestra de cómo el fútbol puede sorprender a propios y extraños con situaciones inusuales que, a veces, parecen sacadas de un guion de película.