El gobierno de Javier Milei tiene como una de sus metas para 2025 terminar de desarmar el cepo cambiario que mantiene bajo control el flujo de dólares. Con ese objetivo avanza en un acuerdo con bancos, que viene negociando desde mediados del año pasado, por el cual obtenga fondos que permitan reforzar las reservas. Además, continúa trabajando con el Fondo Monetario Internacional (FMI) en el nuevo plan. Las novedades, esperan en Casa Rosada, estén cerradas para los primeros meses del año.
El gobierno de Javier Milei "está cerca" de acordar un crédito con bancos y avanza la negociación con el FMI
Lo confirmó una alta fuente a Ámbito. La llegada de dólares será clave para liberar el cepo cambiario. También espera cerrar el acuerdo con el FMI en los primeros días de marzo.
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Ámbito pudo confirmar la información pese al silencio de voces oficiales. La fuente aseguró que el acuerdo con los bancos "está cerca". "Hoy la situación es un poco diferente dada la acumulación de reservas que se obtuvieron", explicó respecto al repo (repurchase agreement) que se negocia en rigor desde junio de 2024 y que hasta fue confirmado públicamente por el Presidente.
El monto aún es incierto. Aunque si el objetivo es reforzar las reservas para salir del cepo cambiario hay que recordar que distintos responsables de la gestión económica apuntaron a que se necesitarían unos u$s15.000 millones. La menor parte, quizás de cerca de unos u$s3.000 millones, podría venir de los bancos, y el resto del FMI.
A cambio del repo, el Gobierno entregaría bonos a los bancos. Es por eso que la notable baja del riesgo país de las últimas semanas puso al equipo económico en una posición más cómoda para negociar.
Este medio pudo saber que las conversaciones con el organismo internacional que conduce Kristalina Georgieva para un nuevo acuerdo están a punto de concluir y se podría anunciarse en los primeros días de marzo. La negociación tuvo un impasse en los últimos 15 días por las fiestas, pero están muy avanzadas. La Argentina quedó en una posición frente al Fondo gracias a la acumulación de reservas internacionales, y el acuerdo con los bancos sería un nuevo impulso.
En cuanto a la fijación de metas, la Argentina está holgada. Por el ajuste que llevó a cabo la gestión Milei, y que se mantendrá firme en 2025, más la significativa baja de la inflación y el horizonte de superávit fiscal, el Gobierno no tendría ningún problema en cumplir con los requerimientos del FMI.
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