El Gobierno denunció que la intervención de la ANAC detectó numerosas irregularidades

Detectaron una ''falta de control en procesos, burocratización en los procedimientos y una falta de gestión en materia de fiscalización y prestación de servicios, entre otras observaciones que resulta necesario encauzar".

La Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC)

La intervención en la Administración Nacional de Aviación Civil (ANAC), a cargo de María Julia Cordero, detectó una serie de irregularidades tras una auditoría y diagnóstico de la situación realizado a partir de la decisión tomada en julio por el Gobierno de intervenir el organismo.

Mediante un comunicado, detallaron que se reveló ''una estructura inadecuada y sobredimensionada del organismo, discrecionalidad en la aplicación de fondos e ineficiencias en la utilización de recursos", y que además ''se detectó una falta de control en procesos, burocratización en los procedimientos y una falta de gestión en materia de fiscalización y prestación de servicios, entre otras observaciones que resulta necesario encauzar".

Las irregularidades que fueron encontradas

En el informe describieron que, al momento de la intervención, la ANAC presentaba una deuda de $3.131.700.676, heredada de la gestión del Gobierno anterior, una deuda que está siendo analizada: "Las deficiencias en la administración de recursos se expresan principalmente en el manejo de su patrimonio, siendo su flota un punto crítico: el organismo cuenta con 14 aeronaves, valuadas en su totalidad en aproximadamente un millón de dólares, que no se utilizan o están cedidas. La mayoría no vuela hace más de 5 años", explica. Algunas de estas naves estaban cedidas o descuidadas en distintos aeropuertos, donde sufrieron deterioro por la falta de mantenimiento.

Además, detallaron la falta de mantenimiento de autobombas y ambulancias, comprometiendo la seguridad de los aeropuertos; compras irregulares de 350 computadoras por un total de u$s1.225.000, que luego se amplió en 122 computadoras más que costaron u$s427.000 y que nunca ingresaron al organismo; alquileres injustificados, como las 84 cocheras para una flota de solo 18 autos; y la emisión indiscriminada de 600 tarjetas de combustible.

Por último, mencionaron una estructura inadecuada y sobredimensionada con 103 cargos jerárquicos y 68 departamentos o gerencias, además de que de las 63 propiedades de la entidad, al menos 33 estaban ocupadas de manera irregular.

''A raíz de estos hallazgos, ya se recortaron 40 cargos jerárquicos, se cancelaron las tarjetas de combustible sin una asignación operativa específica y se devolvieron casi todas las cocheras. Como ya se dijo muchas veces, no hay lugar para el despilfarro de recursos públicos''.

La intervención en la ANAC

El pasado 11 de julio, la Secretaría de Transporte dispuso la intervención de la ANAC por un plazo de 180 días. El Gobierno oficializó la decisión a través del decreto 606/2024 publicado en el Boletín Oficial. El objetivo de la medida era "elevar sus estándares de seguridad, operacional, digitalizar procesos administrativos y auditar sus últimos años de gestión".

"Dispónese la intervención de la Administración Nacional de Aviación Civil , organismo descentralizado actuante en el ámbito de la Secretaría de Transporte del Ministerio de Transporte, por el plazo de 180 días corridos. Dicho período podrá ser prorrogado por idéntico plazo y por única vez mediante resolución fundada del Titular del citado Ministerio", resolvió el Gobierno a través del mencionado decreto, publicado en el Boletín Oficial.

A partir de esa disposición, el ente comenzó a funcionar de manera descentralizada, bajo la órbita de la Secretaría de Transporte, a través de la Subsecretaría de Transporte Aéreo.

"En los últimos años, fueron realizadas auditorías externas cuyas últimas inspecciones han identificado más de 80 hallazgos que afectan áreas como capacitación del personal técnico, información relativa a la seguridad operacional, otorgamiento de licencias, certificaciones, autorizaciones, obligaciones de vigilancia o resoluciones de seguridad operacional", habían denunciado desde el Gobierno.

"Resultó pertinente la adopción de medidas urgentes y adecuaciones orgánicas, de personal y presupuestarias, que permitan desarrollar ese proceso sin comprometer el cumplimiento de la misión institucional dispuesta por la norma de creación del organismo", remarcaba la norma sancionada entonces.

Desde ANAC especificaron que, a partir de la designación de Julia Cordero como interventora, "se trabajó en la elaboración de un diagnóstico de situación del organismo con el objetivo de identificar los problemas operativos y administrativos que limitan el accionar de la ANAC y proceder a su reestructuración y adecuación a los lineamientos establecidos en el decreto de intervención".