Cámara minera llama a consolidar una red de proveedores locales para la producción de litio

El país tiene una gran oportunidad para posicionarse como líder en la extracción y procesamiento del mineral clave en la fabricación de baterías eléctricas. Sin embargo, este crecimiento también presenta el desafío de fortalecer la cadena de proveedores locales.

Un proyecto minero típico de litio en Argentina requiere aproximadamente 800 proveedores en su fase inicial de exploración y construcción, y cerca de 550 en su fase de producción. 

Reuters

La industria del litio en Argentina está en pleno auge, con una creciente demanda global impulsada por la transición hacia energías renovables y la electrificación de los medios de transporte. La Cámara Argentina de Empresas Mineras (CAEM) destacó que, en la etapa actual de expansión de la minería en el país, se necesita construir una red sólida de proveedores locales para garantizar la eficiencia y competitividad de los proyectos de litio.

En este contexto de crecimiento el país tiene una gran oportunidad para posicionarse como líder en la extracción y procesamiento del mineral clave en la fabricación de baterías eléctricas. Sin embargo, este crecimiento también presenta el desafío de fortalecer la cadena de proveedores locales, quienes juegan un rol fundamental en el desarrollo económico sostenible y la generación de empleo a nivel regional.

CAEM destacó que, en la etapa actual de expansión de la minería en el país, se necesita construir una red sólida de proveedores locales para garantizar la eficiencia y competitividad de los proyectos de litio. En la práctica, esto significa que gran parte de los bienes y servicios utilizados en el sector minero deberían provenir de empresas locales, que ya suman 57.000 trabajadores directos en actividades de apoyo a la minería, lo cual impacta positivamente en la economía regional.

Un proyecto minero típico de litio en Argentina requiere aproximadamente 800 proveedores en su fase inicial de exploración y construcción, y cerca de 550 en su fase de producción. Dado que estas etapas pueden extenderse por varias décadas, la minería no solo genera empleos directos, sino que también ayuda a fortalecer las economías locales mediante la creación de oportunidades laborales indirectas en rubros como transporte, construcción, alimentación y logística.

Los beneficios de una política de “desarrollo local” para la minería

La creación de proveedores locales no solo reduce los costos y riesgos logísticos, sino que también disminuye la dependencia de proveedores extranjeros y garantiza que los beneficios económicos de la industria permanezcan en Argentina. CAEM sugiere que se debería adoptar un enfoque de “desarrollo local” en lugar de “compre local”, lo que implica priorizar a las empresas nacionales sin excluir opciones extranjeras cuando se requiere experiencia o tecnología especializada.

Para que esta estrategia sea efectiva, se necesita el compromiso de las empresas mineras, el gobierno y las instituciones educativas. Esto incluye programas de capacitación, certificaciones de calidad y acceso al financiamiento, especialmente para pymes. De esta forma, los proveedores locales podrán competir y cumplir con los altos estándares que demanda la industria minera internacional, lo que a su vez fortalecerá la cadena de suministro y fomentará el crecimiento del sector.

Impacto ambiental y regulaciones sostenibles en la industria del litio

Aunque el desarrollo de la industria del litio plantea desafíos ambientales, los beneficios de una cadena de suministro local también se extienden a la sostenibilidad. La CAEM promueve la adopción de políticas que favorezcan la regulación y el control ambiental. Los proyectos de litio en Argentina ya implementan prácticas sostenibles, como el uso eficiente del agua en áreas desérticas y la recuperación de salmueras en los salares.

La industria del litio es una gran oportunidad para que Argentina no solo exporte materia prima, sino que también fomente el desarrollo de una red de proveedores locales capaces de agregar valor en el país. Con el compromiso adecuado de los sectores público y privado, el desarrollo del litio puede ser un motor de progreso para las economías regionales, posicionando a Argentina como un actor relevante en la transición energética global.