No todo es glamur en el mundo del cine y Hollywood. A veces, los papeles que catapultan a los actores a la fama pueden ser los mismos que detestan. Tal es el caso de Robert Pattinson, quien alcanzó la popularidad mundial gracias a sus roles en Crepúsculo y Batman, pero confesó que interpretar a Edward Cullen fue una experiencia difícil de aceptar.
Lo llevó a la fama, pero odió hacerlo: la sorprendente revelación de Robert Pattinson sobre un personaje que interpretó
Aunque alcanzó la cima del cine en Hollywood con Crepúsculo, Robert Pattinson confiesa su rechazo hacia el personaje que lo hizo famoso.
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Aunque Crepúsculo lo consolidó como una estrella internacional, Pattinson no guarda los mejores recuerdos de este personaje. Entre críticas al guion y a las peculiaridades de Edward, el actor dejó en claro que no todo fue fácil detrás de cámaras.
Por qué Robert Pattinson detesta a Edward Cullen y lo calificó como su personaje más absurdo
Pattinson no dudo ni un segundo en contar su desagrado por el papel de Edward Cullen. Según el actor: “Edward es probablemente el personaje más ridículo que existe”. Esta fuerte declaración viene de un actor que ha sabido alejarse de los clichés de galán juvenil, explorando roles más complejos en los últimos años.
Pattinson explicó que una de las razones por las que no conectó con Edward fue la descripción idealizada y poco realista del vampiro en los libros de Stephenie Meyer. “Cuando leí los libros, era imposible tomarlo en serio. Era descrito como si fuera una especie de dios perfecto, y eso simplemente no me cuadraba”.
Además, el actor cuestionó la lógica detrás de algunas decisiones del personaje: “¿Por qué alguien de 108 años querría seguir en la escuela secundaria? Es completamente absurdo”. Estas críticas, aunque polémicas, reflejan la incomodidad de Pattinson al interpretar un papel que lo hizo sentir limitado creativamente.
Durante las promociones de la saga, Pattinson también compartió su incomodidad con la dinámica de los personajes. En una entrevista, bromeó diciendo que Edward, si existiera en la vida real, sería “uno de esos tipos que terminan en prisión por acoso”. Aunque dichas declaraciones fueron realizadas con humor, dejan claro el poco aprecio que siente por este rol.
El actor incluso confesó que, de no haber sido parte del fenómeno Crepúsculo, probablemente habría sido uno de los primeros en criticarlo: “Creo que si no estuviera involucrado, odiaría estas películas tanto como cualquier otra persona”.
El contraste entre el éxito mundial de Crepúsculo y el rechazo de su personaje
A pesar de su descontento, Pattinson reconoce que el éxito de Crepúsculo fue clave para abrirle puertas en la industria. La saga recaudó miles de millones de dólares en taquilla y lo posicionó como una de las estrellas más importantes de Hollywood, algo que, según él, siempre será parte de su historia profesional.
Tras el fenómeno global de Crepúsculo, el actor logró reinventarse con roles más desafiantes en películas independientes como Good Time y The Lighthouse. Estas producciones le permitieron demostrar su versatilidad como actor y alejarse del estigma de Edward Cullen.
Hoy, con papeles de alto perfil como The Batman, Robert ha consolidado una carrera que va mucho más allá de su trabajo en la saga de vampiros. Aunque Edward Cullen siempre será un tema de conversación, el actor ha demostrado que es posible superar los estereotipos y convertirse en un artista respetado y multifacético.
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