El cantante Raphael fue internado el pasado martes de 17 diciembre, tras sufrir un supuesto accidente cerebrovascular. Este jueves, confirmaron que el artista de 81 años padece de un linfoma cerebral. Fue ingresado en el Hospital 12 de Octubre en Madrid luego de sentirse indispuesto durante la grabación del especial de Navidad de La Revuelta.
Qué es un linfoma cerebral, la enfermedad que padece Raphael
El cantante español recibió su diagnóstico tras estar internado desde hace más de una semana en el Hospital 12 de Octubre, en Madrid.
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El cantante Raphael recibió el alta tras su diagnóstico de linfoma cerebral
Según el informe, el cantante "presenta un linfoma cerebral primario con dos nódulos cerebrales en el hemisferio izquierdo que justifican los síntomas neurológicos que presentó hace unos días".
Qué es el linfoma cerebral
El linfoma cerebral, también conocido como linfoma cerebral primario o linfoma primario del sistema nervioso central, es un cáncer no Hodgkin poco frecuente y muy agresivo que se origina en el tejido linfático (glóbulos blancos) del cerebro o la médula espinal y también se puede encontrar en los ojos. Este tipo de cáncer se puede tratar de manera eficaz e incluso curar si se detecta a tiempo.
El linfoma del sistema nervioso central (SNC) puede ser "primario" o "secundario".
- El linfoma primario del sistema nervioso central es un linfoma que comienza en el sistema nervioso central y no crece en ninguna otra parte cuando se lo diagnostica. Generalmente se desarrolla en el cerebro, pero también puede afectar los ojos (se denomina linfoma intraocular).
- El linfoma secundario del sistema nervioso central (SNC) es un linfoma que comienza en otra parte del cuerpo y se propaga al SNC. Esto incluye el linfoma que reaparece en el SNC después del tratamiento. El linfoma secundario del SNC generalmente se desarrolla en el cerebro, pero a veces puede crecer en los tejidos protectores que cubren el cerebro y la médula espinal (las meninges).
El tratamiento del linfoma primario del sistema nervioso central generalmente se administra en dos fases:
- La 'terapia de inducción de remisión' tiene como objetivo atacar todo el linfoma que se pueda observar en las exploraciones para lograr una remisión.
- La 'terapia de consolidación' tiene como objetivo destruir cualquier célula de linfoma que haya quedado, evitar que el linfoma regrese y ayudar a mantenerlo bajo control durante el mayor tiempo posible.
Es posible que primero le administren un tratamiento con esteroides para ayudar a reducir el tamaño del linfoma y la hinchazón que lo rodea. Esto ayuda a aliviar los síntomas mientras le realizan las pruebas y antes de comenzar el tratamiento principal. Sin embargo, los médicos intentan no administrarle esteroides hasta que le hayan hecho una biopsia porque pueden afectar el resultado.
Cuáles son los síntomas y secuelas de un LCP
Los síntomas más comunes de un Linfoma Cerebral Primario (LCP) pasan por diversas afecciones que intervienen en el día a día del paciente. Entre ellos, se pueden enumerar:
- A nivel neurológico, conlleva:
- Debilidad en un lado del cuerpo
- Dificultad para hablar
- Problemas de visión
- Cambios en el comportamiento o la personalidad
- Dolor de cabeza: puede ser persistente o empeorar con el tiempo
- Náuseas y vómitos
- Convulsiones
- Problemas de memoria y concentración
Entre las secuelas, según el área de afección de la enfermedad, quedan las dificultades del habla, visión, equilibrio, sensibilidad de una mitad del cuerpo o de la fuerza de una mitad del cuerpo. Puede también afectar la memoria y las funciones cognitivas, a la par de secuelas emocionales, como ansiedad o depresión.
Qué tan común es el linfoma del SNC
El linfoma del SNC es poco frecuente. En los Estados Unidos, solo se diagnostican alrededor de 1500 casos nuevos de linfoma del sistema nervioso central cada año. Se presenta con mayor frecuencia en personas mayores de 50 años, y la edad promedio de diagnóstico es de 65 años, siendo ligeramente más común en hombres. Las personas con VIH, SIDA y otras inmunodeficiencias tienen más probabilidades de recibir un diagnóstico de linfoma del SNC.
Al igual que otros tipos de linfoma, el linfoma del sistema nervioso central se forma cuando las células del tejido linfático comienzan a comportarse de manera anormal. Se multiplican sin control y superan a las células sanas. En el caso del linfoma del sistema nervioso central, las células que comienzan a crecer de manera anormal suelen ser glóbulos blancos (linfocitos) llamados células B.
Los investigadores no están seguros de qué hace que un linfocito se transforme en una célula cancerosa. Aun así, han identificado factores que pueden aumentar el riesgo de padecer linfoma del sistema nervioso central.
Los investigadores informan sobre las tasas de supervivencia del cáncer haciendo un seguimiento de cuántas personas con un determinado diagnóstico de cáncer siguen vivas después de un tiempo determinado, generalmente cinco años. La tasa de supervivencia a cinco años para las personas con linfoma del sistema nervioso central menores de 70 años es del 30 %. El tiempo de supervivencia para las personas mayores de 70 años es de seis a siete meses.
De todos modos, estas cifras son generales y no tienen en cuenta otros factores específicos que afectan el pronóstico. Por ejemplo, los resultados suelen ser mejores si no se tiene un sistema inmunitario comprometido o si el linfoma no se ha propagado más allá del cerebro. Las tasas de supervivencia tampoco tienen en cuenta el impacto que los nuevos tratamientos pueden tener en la esperanza de vida.
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