3 de enero 2025 - 11:10

Cuáles son los Cedears, las acciones y las bonos argentinos con mayor potencial para comprar en 2025

Tras un extraordinario 2024 para las acciones y los bonos argentinos, los inversores empiezan a rearmar sus carteras de cara al inicio del nuevo año, buscando nuevas oportunidades en un mercado que será mucho más selectivo.

Durante 2024, los instrumentos de renta fija local tuvieron un desempeño sobresaliente, superando a sus pares de mercados emergentes. 

Durante 2024, los instrumentos de renta fija local tuvieron un desempeño sobresaliente, superando a sus pares de mercados emergentes. 

Depositphotos

Durante 2024, los instrumentos de renta fija local tuvieron un desempeño sobresaliente, superando a sus pares de mercados emergentes. En particular, los bonos globales registraron subas promedio del 100% a lo largo del año, mientras que, en el segmento de bonos en pesos, los instrumentos con mayor duración fueron los más beneficiados.

Por ejemplo, el TO26 (Bonte 2026) mostró un incremento del 120% medido en dólar MEP, y los Boncer largos alcanzaron rendimientos similares a los de los globales. Asimismo, las Lecaps licitadas en 2024 lograron retornos comparables a los de los globales desde el inicio de su cotización.

Bonos soberanos en dólares y en pesos: perspectivas 2025

De cara a 2025, desde Delphos Investment consideran que "los instrumentos locales podrían mantener esta tendencia alcista, aunque con un margen de expansión menor".

Por un lado, el riesgo país ya se encuentra en la zona de los 600 puntos básicos, un descenso significativo respecto de los 2.000 puntos registrados hace un año. Por otro lado, los rendimientos de los bonos en pesos durante 2024 fueron impulsados por la apreciación del tipo de cambio y por tasas nominales elevadas, que se ajustaron gradualmente en un contexto de desinflación.

Hacia adelante, "la elección de la moneda en la que posicionarse se torna más compleja. El tipo de cambio implícito entre la curva de tasa fija y los bonos en dólares sugiere un recorrido ascendente y progresivo del dólar MEP, que podría alcanzar aproximadamente $1.350 hacia finales de 2025", afirman desde Delphos. En un escenario donde se logre reducir el "crawling peg" a mediados de febrero y mantenerlo en torno al 1% mensual durante el resto del año, la brecha cambiaria debería ubicarse alrededor del 8% para que sea indiferente optar por bonos a tasa fija o por el GD35, calculan.

Desde Grupo IEB también se muestran optimistas respecto a los bonos "Hard Dollar", a pesar de que operan con paridades promedio de u$s73,5. "Las elecciones de medio término serán uno de los factores de riesgo en el 2025 pero con la inación a la baja y la reactivación económica un resultado favorable para el ocialismo que le permita ganar gobernabilidad luce como el escenario más favorable. En el mismo orden resulta importante mencionar el riesgo relacionado a la acumulación de reservas que permita seguir pagando los diferentes vencimientos y que también luce acotado", argumentan.

Para perfiles conservadores: bonos en dólares

Por un lado, para perfiles más aversos por el riesgo y carteras de gestión más pasiva la curva "hard-dollar" aún tiene espacio para expandirse hacia la zona de 400 puntos básicos como escenario optimista donde los bonos convergerían al resto de los emergentes.

Simulando retornos a diciembre de 2025 y asumiendo curvas de rendimiento en TIRs de 9%, 8% y 7% (en la actualidad la curva se encuentra prácticamente en niveles de 11%), desde IEB ven que el "upside" potencial para el 2025 "varía entre 20% y 30%, con los mayores retornos concentrándose en el tramo largo de la curva".

A su vez, ponderan el Bopreal 2026 (BPY26), un bono emitido por el BCRA con un rendimiento anual del 10% en dólares. "Es una opción dolarizada que permitirá reducir la exposición al riesgo de tipo de cambio. Representa una alternativa más conservadora y menos volátil que los bonos soberanos con vencimiento total dentro de la administración actual", argumentan los analistas.

Para perfiles arriesgados: bonos en pesos

Por otro lado, teniendo en cuenta que el equipo económico ha destacado que todavía hay margen para la apreciación cambiaria, y no se percibe una salida inmediata del cepo cambiario, en el mercado creen que esta situación podría beneficiar a los bonos en pesos, al reducir la presión sobre el tipo de cambio. Por ende, "para perfiles más agresivos, consideramos crucial monitorear los movimientos de la brecha cambiaria durante 2025. Esto permitirá aprovechar oportunidades en bonos en pesos cuando la brecha se encuentre en un rango superior, donde los potenciales rendimientos del carry trade aumentan", dicen desde Delphos.

Con todo, algunos operadores de la city ponderan actualmente la Lecap de Junio (S30J5), que rinde un 2,5% mensual. "Luce atractivo fijar esta tasa con una perspectiva de tipo de cambio estable en el corto plazo e inflación a la baja. Una posible baja en el ´crawling-peg´ podría venir acompañada de una baja en la tasa de política monetaria (positivo para tasa fija)", dicen desde IOL. Y también valoran el Boncer 2026 (TZX26): "Pensando en un perfil más agresivo, el TZX26 rinde 8,8% anual, y tiene una duración de 1,40 años. Tasas reales en torno al 9% son interesantes para mantener un retorno mensual 0,75% por encima de la inflación", añaden.

Si la brecha vuelve a comprimir a niveles de 5% o si se mantiene en los niveles actuales durante los próximos meses el "carry" podría seguir teniendo atractivo, creen desde IEB. "Si bien son buenos rendimientos los que podría ofrecer la estrategia de `carry` no está claro que la relación riesgo retorno sea favorable frente a la alternativa de los bonos `HD`, enfatizan.

Para quienes tengan que gestionar pesos en el corto plazo, ven conveniente tener "una cartera diversicada entre tasa fija y CER. Con una mirada de mediano plazo, el tramo largo de la curva CER que también opera en niveles de CER+9%, frente a un levantamiento del cepo podría ir más abajo y podría existir valor".

Acciones argentinas: perspectivas 2025

De las últimas 21 semanas, 17 han sido positivas para el S&P Merval. Pero, ya desde comienzos de diciembre, ha encontrado cierta pausa , más allá del fuerte ascenso en la primera rueda del año. Es cierto que, por cuestiones estacionales, estas semanas destacaron por su bajo volumen y escasez de "drivers" que refuercen la tendencia al alza. Pero, ya entrado el 2025, sería esperable que se recupere la volatilidad, más allá del entuasiasmo de fondo que perdura en la city.

"Continuamos con una mirada optimista sobre el mercado de equity local para este año. Nuestro escenario base arroja un potencial retorno de 30% que llevaría al S&P Merval a niveles de 3.000 puntos", estiman desde IEB.

En ese sentido, en su cartera de renta variable recomendada incluyen:

-Oil & Gas (35%): Se mantiene una alta exposición en este sector con YPF, Transportadora de Gas del Sur y Pampa Energía. La apuesta radica en los avances de proyectos para incrementar la capacidad de evacuación desde Vaca Muerta, un motor clave para el crecimiento.

-Sector bancario (35%): El sector financiero también ocupa un lugar destacado, con foco en BBVA Argentina, Grupo Supervielle y Banco Macro. Se prevé que los retornos sobre el patrimonio (ROE) hayan alcanzado su piso en el último trimestre de 2024, impulsados por el repunte en líneas de crédito como préstamos personales, hipotecarios y prendarios.

-Sectores regulados (20%): Central Puerto, Transportadora de Gas del Norte y Metrogas lideran en este rubro. Los recientes incrementos tarifarios han mejorado ingresos y capital de trabajo. Se espera que futuros ajustes tarifarios generen un impacto positivo en los balances, consolidando el crecimiento.

-Construcción y actividad económica (10%): En Real Estate, la selección incluye a IRSA, con expectativas de revalorización del metro cuadrado y un repunte en el consumo en centros comerciales. En Materiales, la apuesta es Loma Negra, que podría beneficiarse de un crecimiento en la obra privada y la posible salida de InterCement, un catalizador positivo para la compañía.

"Mantenemos una postura optimista respecto al mercado argentino, más allá de la volatilidad que pueda surgir a raíz de las elecciones de medio término, vemos algunos catalizadores claves que podrían dar un impulso mayor a las acciones locales, como el levantamiento del cepo, la reclasificación de Argentina como ´mercado Emergente´, el buen desempeño en las elecciones que le permita al Gobierno facilitar mayores reformas estructurales", señala Maximiliano Donzelli, mánager de Estrategias de Inversión en IOL Inversiones. Todas estos catalizadores favorecen la llegada de inversiones internacionales al país, por lo que los analistas son optimistas de cara al 2025, con una marcada preferencia por el sector energético, como YPF y Transportadora Gas del Sur.

En Brasil, por su parte, aunque actualmente neutrales, "consideramos que un posicionamiento gradual en activos brasileños será estratégico a medida que las expectativas de recortes de tasa y las elecciones presidenciales se acerquen. En el período preelectoral, se recomienda una rotación parcial desde activos argentinos hacia brasileños. De esta manera, preferimos mantener las posiciones actuales en acciones argentinas y empezar a sumar acciones de Brasil gradualmente a partir de la segunda mitad del año", enfatizan desde IOL.

Con valuaciones ya exigentes para varios componentes del Merval, desde Delphos sugieren aprovechar estas primeras semanas del año "para tomar parte de las ganancias generadas durante 2024, reducir exposición al ´equity argentino´ y buscar activos con menor volatilidad y valuaciones menos exigentes".

En su lugar, surgen algunas opciones atractivas para quienes quieran sostener posiciones en activos de riesgo latinoamericano. Una de ellas es Corporación América Airports (opera como Cedear en BYMA), "cuya volatilidad es significativamente menor a la de la gran mayoría de los papeles puramente argentinos, y por su participación en Aeropuertos Argentina 2000 permite seguir apostando al progreso de la economía doméstica", expresan los analistas de Delphos. Y otras de las sugeridas de la consultora, luego de las bajas recientes son: Mercado Libre y NuBank, que "arrastrados por el mal momento de Brasil y la fuerte corrección que mostraron las últimas semanas, permiten acumular posición en activos con mucho potencial de crecimiento", proyectan.

Cedears: perspectivas 2025

Dado el contexto actual, desde IOL favorecen alternativas internacionales más conservadoras para los primeros meses del año. El mercado parece haber descontado ya un sólido desempeño de la economía para el próximo año, impulsado por el reciente rally en sectores pro-cíclicos. Sin embargo, aún falta mayor claridad sobre la agenda del nuevo presidente de Estados Unidos, especialmente en lo referente a su política exterior.

Por su parte, la Reserva Federal, inclinándose hacia una pausa en su programa de flexibilización monetaria para evaluar con mayor certeza el trayecto de la inflación, ha reducido sus expectativas de recortes en 2025 a solo dos, en lugar de los cuatro anticipados en la reunión de septiembre. En este contexto, el mercado anticipa un aumento de la volatilidad durante el primer trimestre. No obstante, una vez que el presidente asuma su cargo y establezca una hoja de ruta clara, despejando las incertidumbres actuales, las posibles medidas como recortes de impuestos y desregulación podrían brindar un impulso adicional a los mercados.

Bajo este panorama, desde IOL recomiendan sumar a carteras algunos de estos Cedears:

-Goldman Sachs (GS): los bancos principales y regionales enfrentan menos presión en el margen de interés neto con recortes más lentos en la tasa de referencia. Además, esperamos que un crecimiento sostenido compense las presiones sobre los márgenes de interés, y la desregulación bajo la próxima administración de Trump será un fuerte impulso para los bancos. Goldman Sachs sobresale como una sólida alternativa dentro del sector financiero al ser el principal beneficiario de una recuperación en mercados de banca de inversión, como M&A, ECM y DCM.

-Altria Group (MO): con un rendimiento de dividendos del 7,7%, ofrece una fuente confiable de ingresos pasivos en comparación con sus pares. Nos gusta Altria como una alternativa conservadora para el 2025, con un P/FCF de 10,7x, elevados márgenes de rentabilidad y un crecimiento proyectado sostenido para los próximos años producto de su estrategia de diversificar su cartera de productos más allá de las alternativas de humo tradicionales. Además, se espera que enfrente menores presiones regulatorias tras la elección de Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, del cual se espera que tenga un enfoque menos restrictivo y ayude a mitigar riesgos regulatorios.

- Russell 2000 (IWM): las empresas de pequeña capitalización, que están cotizando a un descuento histórico en comparación con las de gran capitalización, deberían beneficiarse de futuros recortes de tasas y cualquier indicio de mejora en la economía. Además, el proteccionismo de Trump debería beneficiar principalmente a estas compañías dada su baja exposición a mercados internacionales relativo a las de mayor capitalización, concluyen desde IOL.

Dejá tu comentario

Te puede interesar