Dólar y FMI: la city espera la letra chica del acuerdo y no descartan volatilidad en el mediano y largo plazo

A la espera de mayores novedades en torno al acuerdo alcanzado con el Fondo y del dato de inflación que se conocerá el viernes, los analistas observan algunos claroscuros en la economía argentina.

El Gobierno encontró un nuevo catalizador para conquistar el entusiasmo en el mercado.

El Gobierno asegura que está próximo a cerrar las negociaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI), con las que Javier Milei busca sumar nuevo endeudamiento para apuntalar la frágil situación de las reservas y contener el dólar al menos hasta las elecciones.

Pese a que la normativa vigente exige que todo programa con el FMI sea aprobado por una ley del Parlamento, el Ejecutivo anunció que enviará al Congreso un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) para pedir un aval para avanzar en el acuerdo con el organismo, aunque no dará detalles del contenido del programa en cuestión.

"La idea del Gobierno es no demorar la aprobación del nuevo acuerdo con el FMI y, por otro lado, evitar un nuevo episodio de desgaste en el Congreso", dijo Wise Capital. "Así, anunció que emitirá un Decreto de Necesidad y Urgencia (DNU) en lugar de enviar un proyecto de ley. De esta manera, sólo requiere la autorización sin ningún tipo de análisis técnico de su contenido. Sólo requiere de la aprobación de una de las Cámaras para hacerse efectivo", explicó.

El Gobierno anunció que el acuerdo con el FMI saldrá por DNU

"Agotadas las variables, un nuevo acuerdo con el FMI parece ser la última carta disponible para el Gobierno. Sin embargo, aquí tampoco faltan las contradicciones. Históricamente las políticas del Fondo se opusieron a los esquemas de apreciación cambiaria y a la utilización de reservas para contener el precio del dólar", dijo un informe de CESO (Centro de Estudios Económicos y Sociales Scalabrini Ortiz).

Agregó que "también al cepo cambiario. Desarmar este andamiaje y/o devaluar para acceder a dólares frescos significaría un recalentamiento de los precios, caídas más pronunciadas de los ingresos, y un efecto negativo en las elecciones".

"Un acuerdo con el FMI está en proceso, y el Gobierno emitirá un decreto para autorizarlo, buscando obtener la aprobación implícita del Congreso al evitar que se revoque. Los detalles del programa no estarían incluidos y, según el ministro Caputo, se firmarían en abril, aunque rumores recientes sugieren novedades hacia mediados de marzo", dijo Max Capital.

Agregó que "además de metas fiscales y de activos domésticos netos, el programa probablemente incluirá un piso de reservas netas para evitar una apreciación excesiva de la moneda y permitiría el uso de fondos bajo un esquema preestablecido".

"La intención del Gobierno es utilizar los desembolsos del FMI para retirar bonos no transferibles (Letras Intransferibles o LI) en poder del Banco Central. Bajo el mecanismo de valuación revisado introducido en 2024, estos bonos ahora se registran a 'costo amortizado, sujeto al límite de valor recuperable', lo que en su momento generó una pérdida significativa en el balance del banco", dijo Adcap.

"Aplicando, por ejemplo, u$s10.000 millones de los desembolsos del FMI, el Gobierno podría cancelar u$s20.000 millones en LI, reduciendo así su deuda bruta. Sin embargo, la deuda neta, es decir, excluyendo la deuda dentro del sector público, aumentará", explicó.

Otros datos clave mantienen la atención de los mercados

"Se descuenta que el gobierno seguiría contando con independencia en su estrategia tras los importantes y sostenidos progresos económicos alcanzados en el último año", estimó el economista Gustavo Ber.

"La inflación de febrero fue de 2,3% mensual y registró un crecimiento interanual de 63,4%", dijo el Centro de Estudios Económicos de Orlando Ferreres & Asociados.

"La economía argentina tuvo logros significativos en términos de recuperación y reducción de la inflación, pero también presenta desafíos importantes en cuanto a la generación y acumulación de reservas y la estabilidad financiera de corto plazo", dijo José María Segura de PWC Argentina.

"Las reformas estructurales encaradas hacen vislumbrar un positivo panorama en el mediano y largo plazo. Sin embargo, los desafíos de corto plazo pueden implicar un cierto grado de volatilidad que opaque temporalmente los logros alcanzados", señaló.

"La economía atraviesa un momento de contrastes. Mientras la desaceleración de la inflación brinda un respiro y mayor previsibilidad, la apreciación del peso y la creciente presión de la competencia externa generan preocupación. En este contexto, mejorar la competitividad es clave para sostener el crecimiento y evitar nuevos desequilibrios", estimó Osvaldo Giordano.