La guerra arancelaria entre Estados Unidos y China ha entrado en su segunda fase, que pondrá a prueba la resistencia y la fuerza de ambas partes.
EEUU vs China: comenzó la segunda fase de la guerra arancelaria
China está adoptando un enfoque de tres pasos: represalia, estímulo y negociación, en lugar de apresurarse a llegar a acuerdos.
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La incertidumbre sobre los aranceles dominó los primeros 100 días de Trump. El desenlace sigue siendo incierto.
China está adoptando un enfoque de tres pasos: represalia, estímulo y negociación, en lugar de apresurarse a llegar a acuerdos. China ha comprendido desde hace tiempo que no puede proteger sus intereses fundamentales y, al mismo tiempo, hacer concesiones que satisfagan a Estados Unidos. Su represalia arancelaria busca que ambas partes se sienten a la mesa de negociaciones más pronto.
De hecho, el secretario de Comercio de Estados Unidos ha confirmado que la negociación entre ambas partes se ha llevado a cabo a través de intermediarios. Mientras tanto, confiamos en que China implementará más estímulos para evitar una caída significativa en el crecimiento de su PIB y sus mercados. Además, China diversificará sus ventas más allá del mercado estadounidense hacia otros países vecinos, como lo demuestra la reciente "Conferencia Central sobre Trabajo Relacionado con Países Vecinos" celebrada por los responsables políticos chinos, con la visita programada del presidente Xi a Vietnam y otros países del Sudeste Asiático.
¿Cuál es el impacto en las exportaciones de China a Estados Unidos?
Según datos de la Oficina Nacional de Estadística de China, las exportaciones totales de China a EE. UU. ascendieron a casi 525 000 millones de dólares estadounidenses en 2024. La mayoría de las industrias exportadoras chinas tienen una capacidad baja o moderada para trasladar el aumento de aranceles a los clientes.
Las empresas chinas necesitan aumentar el valor de sus productos, explorar nuevos mercados, optimizar las cadenas de suministro y reducir su dependencia del mercado estadounidense. En cuanto al gobierno, se necesita apoyo para las pequeñas y medianas empresas (pymes) de los sectores afectados.
¿Cuál es el impacto sobre las importaciones de China desde Estados Unidos?
Según datos de la Oficina Nacional de Estadísticas de China, China importó bienes estadounidenses por un total de aproximadamente 164 mil millones de dólares en 2024. En general, el impacto en la dependencia de las importaciones de China parece manejable, debido a la disponibilidad de fuentes alternativas para productos de gama baja y al acceso ya limitado a productos estadounidenses de gama alta.
¿Qué apoyo inmediato hemos visto?
- Mercados de capitales: Central Huijin (un inversor estatal controlado en última instancia por el Ministerio de Finanzas) y otras empresas estatales hicieron un esfuerzo concertado para intervenir en los mercados bursátiles nacionales para contrarrestar la ola de ventas desatada por la guerra comercial con Estados Unidos.
- Moneda china: La combinación de depreciación del tipo de cambio y recortes de las tasas de interés podría desencadenar represalias por parte de Estados Unidos. Por lo tanto, la solución óptima para China es la estabilidad: estabilizar el tipo de cambio y permitir que fluctúe dentro de un rango limitado.
- Autoayuda industrial: JD.com ha anunciado que comprará 200.000 millones de RMB en productos de exportación a lo largo del año para ayudar a los exportadores. Más de una docena de plataformas en línea, como la cadena de supermercados Freshippo Meituan de Alibaba, Douyin (ByteDance), Kuaishou y VIP.com, así como minoristas tradicionales como Yonghui, CR Vanguard y Lianhua, han anunciado iniciativas similares.
Mientras tanto, los exportadores chinos pretenden diversificar su base de clientes en la UE y los países en desarrollo.
Implicancias para los inversores
Al abordar las complejidades de la actual guerra comercial, es imperativo reconocer las amplias transformaciones socioeconómicas que se están produciendo en China. La transición de una era de fabricación a gran escala a una era digital inteligente está transformando el panorama de la inversión en China. Es probable que el sector tecnológico atraiga un importante apoyo gubernamental, siendo crucial en la competencia entre Estados Unidos y China, y también se beneficie del auge de la economía digital.
Más allá del sector tecnológico, el consumo interno tiene un amplio margen de crecimiento, dado que solo representa alrededor del 56 % del PIB en 2023, muy por debajo del promedio mundial del 76 %. La estrategia de doble circulación busca fortalecer la capacidad de producción y consumo interno de China como defensa contra futuras crisis económicas.
En última instancia, la guerra comercial con Estados Unidos podría incluso ser positiva para China, si se convierte en un poderoso catalizador que acelere la transformación hacia una economía más dependiente de la demanda interna.
*Por Victoria Mio, gestora de Carteras en Janus Henderson.
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