El crédito en Argentina cierra un año histórico. Tras años de crecimiento rezagado frente a la inflación, la estabilidad cambiaria y una mejora en las principales variables económicas impulsaron un notable incremento en las líneas de crédito, tanto en pesos como en dólares. Las tasas de interés, que a fines de diciembre 2023 superaban el 100%, bajaron con fuerza y marcaron una mejora significativa.
El crédito va camino a coronar en 2024 su primera suba real en seis años: ¿cuáles son las líneas que lo impulsaron?
Con la baja de la inflación, la mejora en las variables económicas y tasas más competitivas, el sistema financiero ya empieza a pensar en la solvencia y en el avance de los procesos para hacer frente a una mayor demanda en el 2025.
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Aunque el país aún mantiene un bajo porcentaje de crédito en relación con su PBI (solo representa el 8% frente a cerca del 30% promedio regional), las perspectivas son optimistas, consolidando un escenario alentador para el futuro. De hecho, es para destacar que, el saldo real de crédito total tanto en pesos como en dólares al sector privado, acumula un crecimiento interanual del 12% real, revirtiendo por primera vez en seis años las tasas interanuales negativas.
Cómo cierran todas las líneas de crédito este 2024
A datos de fines de noviembre del Banco Central, los préstamos en pesos al sector privado representan una suba de $34 billones en todo el año, equivalente al 216,6% anual que se ubica por encima de la inflación del período, consolidando 7 meses consecutivos de crecimiento en términos reales. Si bien la recesión económica fue un gran factor del "parate" que sufrieron los créditos en la primera parte del año, ya desde mayo se comenzó a ver una recuperación en todas las líneas.
En el mismo sentido, los préstamos personales también tienen un crecimiento interanual superior a la inflación (del 381,7%) con un avance real respecto al último año, del 80%. "El crecimiento de los préstamos personales fue debido a que de alguna manera se habían quedado retrasados en relación a la línea de tarjetas de crédito. Estos segmentos en el largo plazo se mueven mas o menos parejos, manteniendo cierta paridad en los montos adeudados. Si tomamos como referencia personales + tarjetas = 100, generalmente están 50 a 50. El año pasado llegaron a estar 27 préstamos y 73 tarjetas. Últimamente se encuentran 61 tarjetas y 39 préstamos. Por tal motivo pensamos que el año entrante se colocarán más préstamos personales que saldos financiados con tarjetas de crédito", expresó Guillermo Barbero, socio de First Capital Group al ser consultado por Ámbito.
Por otra parte, los créditos hipotecarios, incluidos los UVA tuvieron una suba considerable, del 151,7% pero por debajo del índice de precios. De todas maneras, desde septiembre se observa un repunte que se consolidará en 2025. Vale recordar que esta línea se impulsó fuertemente con el Régimen de Regularización de Activos, más conocido como "blanqueo de capitales" que permitió reinvertir en viviendas.
En cuanto a los créditos prendarios, la variación interanual es del 212,6% mientras que préstamos comerciales tuvo una suba del 212%. Por último, y un dato no menor, es la performance de los préstamos en dólares que aumentaron un 192,6% en el año vs un 2023 que cerró con un crecimiento de apenas el 40%.
Perspectivas para 2025
Guillermo Barbero, Socio de FCG resaltó que, desde su perspectiva, los créditos personales serán los favoritos del 2025, en principio por que se esperan tasas más competitivas y porque las familias optarían por usar esta línea que permite además de la obtención de montos más grandes, mejor plazo de pago que una tarjeta de crédito. Por otro lado, reafirma que aún falta recorrido para llegar a los máximos históricos de 2018.
Por otra parte, desde el Banco Nación, en consulta con este medio, destacaron que esperan incrementar tanto la cantidad como el monto de las colocaciones de préstamos personales e hipotecarios, "consolidando nuestra posición como líderes del sector. En préstamos personales, proyectamos continuar optimizando la oferta digital para nuestros clientes, mediante nuevos beneficios y el lanzamiento de líneas de créditos orientadas a destinos estratégicos, con el fin de diversificar aún más nuestra cartera de productos. De la misma manera, en el caso del producto Hipotecario, se profundizará la digitalización, reduciendo tiempos y agilizando la operatoria".
Adrián Scosceria, Gerente de Banca Empresas del Banco Macro, estimó que 2025 será un año muy importante en términos de volúmenes de créditos personales. "Es un gran desafío poder satisfacer lo que esperamos va a ser una mayor demanda de préstamos de parte de las empresas, tanto las pymes, como las medianas compañías y las corporativas. Todos estos segmentos van a necesitar más crédito, financiar su capital de trabajo, siendo cada días más eficienes", señaló.
Desde Banca Empresas de esta entidad, sostienen que muchos clientes a nivel nacional habían paralizado proyectos por las dificultades macroeconómicas que, si se consolida la baja de la inflación, requerirán financiamiento a mediano y largo plazo, de entre 3 y 5 años.
Por otra parte, Gustavo Manriquez, CEO del Banco Supervielle, destacó que el sistema financiero argentino "tiene un enorme potencial para crecer. Estamos ante una gran oportunidad de seguir fortaleciendo el acceso al financiamiento y fomentar el desarrollo económico del país. Nuestro objetivo para 2025 es claro: consolidarnos y fortalecernos como uno de los principales actores del mercado financiero argentino", le dijo a este medio sobre los planes de la compañía.
Bancos exploran nuevas alternativas
Una novedad que remarca en buena medida el futuro del financiamiento local fue lo dicho por Claudio Cesario, presidente de la Asociación de Bancos de la Argentina (ABA) que nuclea a las entidades privadas, en el marco del cierre de fin de año. Pensando en el 2025, los bancos están explorando nuevas alternativas para financiar la expansión de los créditos hipotecarios. Además de captar depósitos de ahorristas, estarían considerando, para el año 2025, emitir Obligaciones Negociables y acciones en el mercado de capitales, con el fin de contar con un mayor respaldo financiero frente al aumento de la demanda de préstamos para la compra de viviendas. Ya a cierre de este año, muchos ya están demorando carpetas para poder administrar los fondos.
"El año que viene habrá emisiones de bonos de bancos e incluso de acciones para poder crecer en capital y seguir bancando el crédito", adelantó Cesario. De cara a 2025, el presidente de ABA proyectó que el resurgimiento de los créditos se consolidará, lo que contribuirá con el crecimiento de la economía y será beneficioso para familias y empresas.
En este contexto optimista de cara al futuro, vale la pena destacar, por último, el rol del ecosistema fintech cuya vertical en créditos, todavía sigue estando relegada. En este sentido, Julián Sanclemente, CEO de Alprestamo afirmó que las fintech tienen un rol clave en este desafío. "El mercado argentino tiene un potencial extraordinario para crecer. Pero para que este renacimiento del crédito se traduzca en desarrollo real, debemos trabajar juntos: bancos, fintech, reguladores y usuarios. El camino está trazado, pero dependerá de cada uno de nosotros aprovechar esta oportunidad con una mirada estratégica y enfocada en el futuro".
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