En las últimas ruedas, las entidades financieras salieron a comprarle al Banco Central una importante cantidad de Letras Fiscales de Liquidez (LEFI). Así, este miércoles, el stock en cartera de los bancos de este instrumento de regulación monetaria, emitido por el Tesoro, alcanzó su máximo nivel desde que el equipo económico lo puso en funcionamiento: $15,35 billones.
Los bancos vuelven a comprar LEFI y el stock alcanza su máximo nivel
Este miércoles, ascendió a $15,35 billones la cantidad de Letras Fiscales de Liquidez en poder de las entidades financieras. Los motivos y los posibles impactos.
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El día anterior, los bancos le compraron al BCRA más de $2 billones en LEFI y la cartera total ascendió a $15,27 billones, según los datos publicados por la propia autoridad monetaria. Este salto, en la práctica, significó una intensificación de lo ocurrido durante las siete ruedas previas. Entre el 5 de noviembre (cuando el stock en poder de los bancos había bajado a $9,4 billones) y el martes pasado, las entidades adquirieron $5,8 billones, lo que implicó un rápido incremento de sus tenencias del 61,9%. El miércoles, sumaron otros $77.393 millones hasta alcanzar el monto actual.
Las LEFI son el instrumento que el Gobierno lanzó el 22 de julio para reemplazar a los pases pasivos del Central y completar la migración de la deuda remunerada del BCRA hacia el Tesoro. Se trata de letras emitidas por Economía, pero que son administradas por la entidad que preside Santiago Bausili.
En total, se emitieron $20 billones que, en su momento, el Tesoro le canjeó al BCRA a cambio de otros títulos públicos. A partir de fines de julio, cuando el Central suspendió la colocación de pases pasivos a un día, comenzó a administrar la liquidez del sistema financiero de forma diaria a través de operaciones de compraventa de LEFI con los bancos. Básicamente, las letras funcionan de manera similar a los pases pasivos (tienen liquidez diaria y devengan la tasa de política monetaria), pero el costo de los intereses debe ser cubierto por el Tesoro a través del ajuste fiscal. Fue el modo que encontró el equipo económico para cerrar la canilla de emisión endógena que representaba el pago de intereses por parte del BCRA.
Desde su lanzamiento, el stock de LEFI en poder de los bancos muestra importantes oscilaciones. Pero nunca había alcanzado el nivel actual. Debutaron con $10,85 billones. Desde ese momento, hubo un subibaja que respondió a la administración de la propia liquidez de las entidades financieras, a la demanda de crédito de sus clientes y a movimientos tácticos entre títulos públicos que cotizan en el mercado y las Letras Fiscales que administra el Central. El nivel más bajo se alcanzó el 4 de septiembre ($6,8 billones) y el pico son los $15,3 billones actuales. Cuando el stock crece implica una contracción monetaria y cuando se reduce redunda en una expansión de la base.
¿Por qué los bancos salieron a comprar LEFI?
“Lo que está pasando es que las últimas licitaciones del Tesoro fueron expansivas y ahí ya subió alrededor de $1,5 billones el stock de LEFI (el 11 de noviembre). Y después están las compras de dólares del BCRA (que implican una emisión de pesos), que tienen mucho componente MEP, o sea, son financiaciones, y esos son pesos que quedan directamente depositados en los bancos. Las entidades tienen que colocarlos en algo y al menos la primera parada la hacen en las LEFI. Esas son las dos razones del crecimiento”, le dijo a Ámbito Gabriel Caamaño Gómez, economista de la consultora Outlier.
En la city, algunas fuentes señalaron que también podría responder al achicamiento del diferencial de rendimientos entre las LEFI y las Lecap, que suele favorecer a estas últimas. Es que, luego de la última baja de la tasa de política monetaria (la que remunera las LEFI) al 35% nominal anual que realizó el BCRA, la curva de rendimientos de los títulos a tasa fija del Tesoro comprimió con fuerza hasta un rango del 43% en la parte más corta y 34% en la más larga. “¿El mercado arrastrará al Banco Central a otra baja de tasas?”, se preguntó un operador en conversación con este medio.
Bancos, LEFI y la próxima licitación de deuda en pesos
Con todo, en el mercado ya posan la mirada en la próxima licitación de deuda en pesos de la Secretaría de Finanzas, que se realizará la próxima semana. Algunos analistas e inversores señalan que el elevado stock de LEFI en poder de los bancos podría hacer que esta vez no ocurra lo mismo que en las últimas dos subastas.
En esas oportunidades, las entidades financieras que necesitaban liquidez (por ejemplo, para abastecer la demanda de crédito de sus clientes o para migrar los pesos a LEFI) dejaron vencer parte de sus tenencias en Lecap sin renovarlas y el Tesoro (que había decidido no ofrecer títulos a tasa fija; solo bonos indexados a la inflación) consiguió un roll over inferior al 100%. Esta vez, al poseer los bancos una mayor cantidad de Letras Fiscales, de las cuales pueden extraer la liquidez que precisen, ¿la licitación tendrá una dinámica distinta?
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