15 de julio 2024 - 19:47

Yen: crecen sospechas de fuerte intervención, ¿cuántas municiones quemó el Banco de Japón?

Los operadores se vieron sorprendidos por el asombroso repunte de la divisa nipona. Se especula con que se gastó más de u$s22.000 millones.

El Ministerio de Finanzas de Japón no confirmó ni negó la intervención en el mercado cambiario de fuertes compras de yenes por dicho monto que indicaría el último esfuerzo de las autoridades japonesas para apuntalar el yen.

El Ministerio de Finanzas de Japón no confirmó ni negó la intervención en el mercado cambiario de fuertes compras de yenes por dicho monto que indicaría el último esfuerzo de las autoridades japonesas para apuntalar el yen.

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Los últimos datos monetarios publicados por el Banco de Japón (BoJ) parecen revelar que en las últimas jornadas el gobierno japonés llevó a cabo una fuerte intervención en el mercado de divisas. Fue en busca de apuntalar al yen, algo que habría insumido nada menos que 22.000 millones de dólares. Sin duda, la envidia del ministro Luis Caputo, quien a diferencia de su par japonés no tiene tantas balas para intervenir como quisiera para bajar la brecha cambiaria.

El Ministerio de Finanzas de Japón no confirmó ni negó la intervención en el mercado cambiario de fuertes compras de yenes por dicho monto que indicaría el último esfuerzo de las autoridades japonesas para apuntalar el yen, que se encuentra en problemas.

Los datos sobre el saldo de la cuenta corriente del banco central japonés mostraron que habrá una fuga de liquidez de más de 3,2 billones de yenes (20.000 millones de dólares) del sistema financiero, por las transacciones con el sector público, cuando se esperaba un superávit de unos 400.000 millones de yenes lo que deja semejante déficit. Sospechas que también recoge la agencia Bloomberg.

Según los observadores del mercado internacional de monedas, la reciente apreciación del yen frente al dólar en los últimos días sugiere una o dos intervenciones de las autoridades japonesas. De todos modos, la moneda japonesa sigue bajo presión después de dos ruedas de fuertes ganancias que, precisamente, desencadenaron dichas especulaciones.

Académicos como Masaaki Shirakawa, profesor de la Universidad Aoyama Gakuin de Tokio y ex gobernador del BoJ señalaron que el banco central japonés necesita quitarse la camisa de fuerza de su duro objetivo de inflación del 2% y adoptar un enfoque más equilibrado en su política monetaria.

Shirakawa destaca que la depreciación del yen en los últimos dos años ha sido rápida y sorprendente ya que hace apenas 13 años la moneda alcanzó un máximo histórico de 75,32 yenes por dólar, mientras que el tipo de cambio actual, de alrededor de 161 yenes por dólar, es el mismo que el registrado en diciembre de 1986.

Crisis del yen: la sorpresa de las “señoras Watanabe”

Las “señoras Watanabe”, como les dicen a los traders minoristas de divisas en Japón amantes del "carry trade", se han visto sorprendidos por el accionar del BoJ. Además, los comentarios que hizo el principal funcionario a cargo de la defensa del yen, Masato Kanda, quien se mantuvo fiel a la estrategia de intentar mantener a los participantes del mercado adivinando, provocaron también una mayor apreciación que rápidamente se diluyó. Le dijo a la prensa que la práctica del organismo era básicamente no decir si han intervenido o no.

Por lo pronto, tanto la emisora japonesa TV Asahi, como el diario Mainichi Shimbun, entre otros, informaron sobre una intervención, citando a un funcionario no identificado del gobierno japonés.

“En este momento estamos viendo una actividad bidireccional en el mercado, pero no un sesgo direccional claro”, dijo Ruchir Sharma, director global de operaciones con opciones cambiarias en Nomura International con sede en Londres y agregó que había “un nerviosismo palpable en el mercado” en las últimas sesiones por parte de los fondos de cobertura que buscaban proteger las operaciones de "carry trade" ante escenarios como el que acaba de desarrollarse.

La reciente apreciación del yen frente al dólar tiene similitudes con otras intervenciones de este año, en las que el Ministerio de Finanzas compró 9,8 billones de yenes para frenar las pérdidas entre fines de abril y principios de mayo. La suba del yen fue la mayor en un solo día desde el 1 de mayo, según Reuters.

“Ciertamente, la magnitud del movimiento sugiere que bien podría haber sido una intervención”, dijo Jane Foley, directora de estrategia cambiaria de Rabobank. “Es muy emocionante y genera repercusiones en nuestra mesa de operaciones”. Sin embargo, la falta de seguimiento hace preguntarse al mercado si el BoJ se está quedando sin munición (o fortaleza) para mantener el control de su moneda.

Vale recordar que el yen subió un 3% frente al dólar sobre el cierre de la semana pasada luego de conocerse los sorprendentemente débiles datos de inflación en EEUU. Los analistas especularon que los responsables políticos habían aprovechado la oportunidad que brindaban las cifras de inflación para ingresar al mercado.

A fines de mayo, Japón confirmó su primera intervención cambiaria desde 2022 con un gasto de 62.000 millones de dólares. El ministerio afirmó entonces que Japón había gastado 9,7885 billones de yenes en intervenciones cambiarias entre el 26 de abril y el 29 de mayo.

Esta cronología coincidió con un fuerte repunte de la moneda japonesa frente al dólar en las semanas anteriores. El yen se había desplomado hasta un mínimo de 34 años de 162 frente al dólar a fines de abril. Más tarde rebotó hasta niveles de 156, lo que desató especulaciones sobre una posible intervención de las autoridades japonesas antes de que se confirmara.

El ministro de Finanzas japonés, Shunichi Suzuki, ha respaldado anteriormente la necesidad de una intervención si los movimientos bruscos de la moneda empiezan a afectar a los hogares y las empresas. El viernes pasado, el yen se estabilizó y se cotizó en torno a 158,5 frente al dólar, tras haber llegado a 157 el jueves, pero volvió a subir a última hora de la tarde cuando se habló de otra intervención. Cayó a 157,71 poco después de que se publicaran nuevos datos en EE.UU.

Otra prueba de la intervención fue que el jueves fue uno de los días más activos para el comercio al contado del yen desde noviembre de 2016, según CME Group, el mercado de divisas regulado más grande del mundo. Se negociaron unos 53.000 millones de dólares en la paridad dólar-yen en la plataforma EBS al contado de CME, el cuarto nivel más alto desde el 1 de enero de 2022, según datos del mercado.

Cabe señalar que los datos oficiales de intervención mensual se publicarán recién a fines de mes, cuando Kanda sea reemplazado por Atsushi Mimura, quien actualmente es director general de la oficina internacional del Ministerio de Finanzas.

El Gobierno de Japón ha tenido dificultades para cambiar el rumbo del mercado cambiario. La inflación se ha mantenido elevada, en el nivel del objetivo del 2% del BoJ o por encima de él, durante más de dos años, siendo el yen un factor clave. A medida que caen los salarios reales, el gasto de los consumidores ha caído cada trimestre durante un año hasta marzo.

Uno de los principales factores que impulsan la debilidad del yen es la diferencia de tasas de interés entre EEUU y Japón, especialmente el diferencial entre los rendimientos de la deuda a largo plazo una vez descontada la inflación. Esto sugiere que un aumento de las tasas por parte del BoJ o un recorte de las tasas por parte de la Fed ayudarían a impulsar el yen. Veremos.

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