Blanqueamiento dental: ventajas y desventajas de los métodos

No todos los tratamientos son iguales y elegir el adecuado es clave para obtener resultados efectivos sin comprometer la salud dental.

El procedimiento es simple y está diseñado para garantizar resultados efectivos y sin complicaciones.

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El blanqueamiento dental es uno de los procedimientos estéticos más buscados para lograr una sonrisa radiante. Sin embargo, no todos los tratamientos son iguales y elegir el adecuado es clave para obtener resultados efectivos sin comprometer la salud dental.

Existen principalmente dos métodos de blanqueamiento dental, cada uno con características específicas:

El blanqueamiento profesional en consultorio se realiza en la clínica y utiliza un gel blanqueador de alta concentración, a menudo, combinado con una luz o láser para acelerar el proceso. Aunque ofrece resultados inmediatos, presenta importantes inconvenientes.

Si bien puede parecer una opción atractiva por su rapidez, su uso tiene desventajas importantes como, por ejemplo, el calor innecesario que se genera por el empleo de las lámparas (led o láser), que puede ocasionar una hipersensibilidad inmediata y una irritación intensa en los tejidos dentarios. Además, la combinación de un gel blanqueador de alta concentración y el calor de la luz puede causar molestias significativas durante y después del procedimiento, y termina afectando la calidad de vida del paciente. Por otra parte, los tratamientos intensivos pueden comprometer el esmalte y la salud general de los dientes.

El blanqueamiento ambulatorio, en tanto, permite que el paciente realice el tratamiento en su casa, siguiendo las indicaciones del odontólogo. Utiliza un gel blanqueador de menor concentración y placas personalizadas. Aunque los resultados son más graduales, ofrece una serie de ventajas clave: menor sensibilidad, no afecta la estructura ni los tejidos dentarios y es más cómodo y fácil de integrar en la rutina diaria. Además, el gel suave y las placas personalizadas evitan la hiperirritación de los tejidos, básicamente, las encías, a diferencia del calor generado por el blanqueamiento profesional.

Por otro lado, a diferencia de otros métodos, no se precisa seguir una dieta blanca y se puede continuar disfrutando de bebidas como mate, café o vino tinto, sin comprometer los resultados.

En síntesis, el procedimiento es simple y está diseñado para garantizar resultados efectivos y sin complicaciones.

Odontólogo, experto en estética dental.