El reconocido sitio gastronómico Taste Atlas publicó un extenso ranking de los lugares más legendarios para comer postres en el mundo. En el top 10 de la lista aparecen dos establecimientos argentinos ampliamente reconocidos, cada uno con su plato dulce más icónico.
Dónde comer los postres más legendarios del mundo: dos argentinos figuran en el top 10
Dos establecimientos figuran en la lista publicada por el blog gastronómico Taste Atlas.
-
Argentina lidera las rutas aéreas más turbulentas del mundo, según un ranking
-
Los equipos deportivos más rentables del mundo en 2025
Desde el sitio aseguraron: "El mundo de los postres, con sus intrincados pasteles y dulces, a menudo difumina la línea entre el arte culinario y la ciencia; la precisión y complejidad que se requieren para su creación se parecen más a experimentos metódicos que a la cocina improvisada. En un mundo repleto de destinos culinarios, hay algunos que se erigen como luminarias, ofreciendo no solo delicias deliciosas, sino también un poco de historia''.
Los representantes argentinos en el ranking son Rapanui y Café Tortoni, de los cuales destacaron el helado de chocolate y el chocolate con churros, respectivamente.
El top 10 de los mejores lugares para comer postre en el mundo
1. Pasteles de Belém (Lisboa, Portugal)
Pastéis de Belém es una famosa pastelería del barrio de Belém de Lisboa, famosa por su tradicional pastel de Belém. Desde 1837, esta delicia se elabora con una receta secreta, creando una crema pastelera envuelta en una masa de hojaldre.
Este dulce, que suele disfrutarse caliente con una pizca de azúcar y canela, es un símbolo muy querido de la cocina portuguesa. Tanto turistas como lugareños suelen hacer cola en la panadería, ansiosos por probar las delicias recién horneadas. Una visita a Pastéis de Belém ofrece una muestra de la historia culinaria portuguesa y es una visita obligada para cualquiera que esté en Lisboa.
2. Hafz Mustafa (Estambul, Turquía)
Hafiz Mustafa es una reconocida marca de dulces fundada en Estambul en 1864, conocida por su amplia variedad de dulces turcos, especialmente baklava. El baklava de Hafiz Mustafa es una sinfonía de capas finas y hojaldradas de masa, unidas por un rico y dulce almíbar y rellenas de nueces finamente picadas.
La preparación experta y los ingredientes de alta calidad le dan a su baklava una textura y un sabor únicos que lo distinguen de los demás. Ya sea de pistacho, de nuez u otras variantes innovadoras, el baklava de Hafiz Mustafa es aclamado tanto por los lugareños como por los turistas. Visitar una de sus tiendas no es solo probar dulces, sino también sumergirse en una gran tradición del arte de la repostería turca.
3. Cafetería Central (Viena, Austria)
El Café Central es una cafetería histórica situada en el corazón de Viena, conocida por su magnífica arquitectura y su rico legado cultural. Desde su apertura en 1876, ha sido un lugar de encuentro para famosos intelectuales, escritores y artistas.
El strudel de manzana del Café Central es una creación sublime, compuesta por finas capas de hojaldre que envuelven un relleno de manzana especiada y servida caliente con una pizca de azúcar en polvo o una cucharada de nata montada. Los pasteleros del café se ciñen a las recetas tradicionales, garantizando un sabor auténtico que captura la esencia de la herencia culinaria austriaca.
4. Pastelería Ideal (Ciudad de México, México)
Pastelería Ideal es una de las pastelerías más emblemáticas de la Ciudad de México, fundada en 1927 y famosa por su amplia variedad de dulces. Ubicada en el bullicioso Centro Histórico, la pastelería es un deleite para la vista con sus impresionantes exhibiciones de pasteles, pasteles y gelatinas.
Las gelatinas son particularmente famosas, conocidas por sus colores vibrantes, diseños intrincados y sabores refrescantes. Elaboradas con precisión artística, estas gelatinas son más que un postre; son una forma de arte comestible. Los visitantes de Pastelería Ideal suelen quedar cautivados por la variedad de formas y sabores, desde patrones florales hasta creaciones con infusiones de frutas.
5. Café du Monde (Nueva Orleans, Estados Unidos)
Café Du Monde es una cafetería emblemática ubicada en el Barrio Francés de Nueva Orleans, Luisiana, y ha sido una institución querida desde 1862. Famosa por sus buñuelos al estilo francés, la cafetería es un lugar de moda tanto para locales como para turistas.
Los buñuelos del Café Du Monde son pasteles de masa frita, generosamente espolvoreados con azúcar en polvo, y suelen disfrutarse con una taza de café de achicoria. Estas delicias esponjosas y doradas se sirven calientes y frescas, lo que proporciona una experiencia deliciosamente dulce y satisfactoria. El ambiente al aire libre del café, junto con el delicioso aroma de los buñuelos, lo convierten en un destino por excelencia de Nueva Orleans.
6. Güllüolu de Karaköy (Estambul, Turquía)
Karaköy Güllüolu es una famosa tienda de baklava situada en el barrio Karaköy de Estambul, con una historia que se remonta a 1843. Como uno de los productores de baklava más antiguos y famosos de Turquía, se ha convertido en sinónimo de este delicioso postre.
El baklava se elabora con delicadeza, utilizando capas de masa fina, mantequilla y nueces, todo endulzado con almíbar o miel. El resultado es una textura crujiente y hojaldrada en el exterior con un relleno suave y sabroso en el interior. Los visitantes de la tienda pueden disfrutar de una variedad de sabores de baklava, cada uno de ellos un testimonio de la rica herencia culinaria de Turquía.
7. Rapanui (Bariloche, Argentina)
Rapanui es una reconocida fábrica de chocolate y heladería ubicada en Bariloche, una región famosa por su producción de chocolate de calidad. Fundada en 1948, Rapanui se ha convertido en un símbolo de la artesanía del chocolate fino y es especialmente famosa por su helado de chocolate.
El helado de chocolate de Rapanui está elaborado con cacao de primera calidad y ofrece un sabor rico y placentero que es un verdadero placer para los amantes del chocolate. Los visitantes pueden disfrutar de esta delicia helada en diversas formas, desde conos hasta sundaes elaborados, cada uno cuidadosamente elaborado con estilo artístico. El interior cálido y revestido de madera de la tienda de Rapanui ofrece un ambiente acogedor para saborear sus creaciones de chocolate.
8. Confitería Colombo – (Río de Janeiro, Brasil)
Confeitaria Colombo es una pastelería histórica y opulenta ubicada en Río de Janeiro, fundada en 1894. El interior, adornado con impresionantes espejos y carpintería ornamentada, transporta a los visitantes a la era de la Belle Époque, ofreciendo una visión de la rica historia cultural de Brasil.
Entre la variedad de dulces tradicionales brasileños, la tienda es famosa por su quindim, una crema horneada de color amarillo brillante hecha con coco, azúcar, mantequilla y yema de huevo. Este delicioso postre es brillante por fuera y suave y masticable por dentro, lo que proporciona un sabor único y auténtico de la cocina brasileña. Los visitantes de Confeitaria Colombo pueden saborear el quindim en el elegante salón de té, disfrutando no solo del sabor sino también de la grandeza que lo rodea.
9. Café Tortoni (Buenos Aires, Argentina)
El Café Tortoni es un café histórico e icónico de Buenos Aires y ha sido un símbolo del patrimonio cultural de la ciudad desde su creación en 1858. Ubicado en la famosa Avenida de Mayo, es famoso por su elegancia atemporal y su atmósfera histórica.
El Café Tortoni también es famoso por sus deliciosos churros. Estos pasteles de influencia española se fríen hasta que se doran y se sirven típicamente con un rico y espeso chocolate caliente para mojar. Los churros del Café Tortoni son famosos por su exterior crujiente y su interior suave, que encarna la textura perfecta. Tanto los lugareños como los turistas visitan el café para disfrutar de este dulce tradicional, a menudo acompañado de música de tango o reuniones literarias.
10. Chocolatería San Ginés (Madrid, España)
Chocolatería San Ginés es un establecimiento legendario de Madrid, conocido por sus deliciosos churros y chocolate. Inaugurado en 1894, se ha convertido en un destino de visita obligada tanto para madrileños como para turistas que buscan el dulce tradicional español.
Los churros se fríen en el momento hasta que adquieren un tono dorado perfecto, son crujientes por fuera y suaves por dentro y se sirven típicamente con una taza de chocolate caliente espeso y rico para mojar. Disfrutarlos a cualquier hora del día es una experiencia reconfortante y placentera. La encantadora decoración de estilo antiguo de la Chocolatería San Ginés se suma al ambiente, haciendo que el disfrute de esta exquisitez sea un evento memorable.
- Temas
- Ranking
- Gastronomía
Dejá tu comentario