¿Cuánto tiempo le dedicas a lo que quieres lograr, cuáles son tus metas? O algo mucho más hermoso, una pregunta que una vez me hice y no hubo nunca más vuelta atrás: ¿cuáles son tus sueños, esos que te roban el tiempo varias veces al día, algo que anhelas mucho y buscas por todos lados, que cuando te lo imaginas te pones feliz, te lleva a la satisfacción y a conectar con tu esencia? ¿Cuáles son esos sueños?
Ejercicios y claves para enfocar metas y cumplirlas: ¿a qué le dedicas tiempo?
¿A qué le dedicas tu tiempo, si pudieras describirlo, a qué sería? ¿A qué le dedicas más tiempo, en qué estás más enfocado?, ¿en todo lo que tienes y agradeces o en lo que te falta? Te invito a conocer este hermoso juego de la mente.
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Si empiezas a hacer una observación sobre a qué le dedicas tu tiempo, vas a observar una herramienta poderosísima para saber exactamente dónde estás parado y por qué.
Te propongo un ejercicio y te invito a que te tomes unos minutos para escribir sobre papel:
¿CUÁLES SON TUS SUEÑOS / METAS / OBJETIVOS?
Sería muy lindo que tengas una bitácora para este viaje, este viaje que estamos haciendo juntos, de conectar con nuestra esencia y despertar a ese gigante dormido.
Cuando te hablo de enfocarte en algo, ¿cómo lo percibes? Empecemos de atrás para adelante. ¿Por qué te traigo estos conceptos? Para que podamos trabajarlos juntos.
La dedicación va de la mano con el enfoque, porque si dedico parte de mi tiempo a enfocarme y concretar la acción que se requiere para lograr mis metas, listo, ya está casi la mitad del camino recorrido. Te traigo estas dos palabras, no desde el lado negativo, desde donde solemos hacer la mayoría de las cosas, sino desde el lado positivo: si yo te pregunto qué quieres para tu vida, cuáles son tus metas, cuál es la vida que sueñas, seguro me hablas generalizando o sin tener una elección clara; pero si te pregunto qué no quieres, te puedo asegurar que me sacas el papiro de acá hasta 100 km de todo lo que no quieres, no te gusta, no te satisface.
Esto es lo que les quiero traer: ¿cómo es más fácil para nosotros, como raza humana, traer a la mente lo que no queremos y nos cuesta tanto lo que sí realmente queremos?
Te invito a que tengas unos minutos de reflexión y hagamos otro ejercicio:
Vas a hacer una lista de todo aquello que no quieres para tu vida o no eliges más, y luego vas a escribir todas esas oraciones pero en positivo y poniendo enfoque y dedicación en lo que sí quieres para tu vida. Así por un lado tenemos dos cosas frente a nosotros en total transparencia.
En primer lugar, sacar cada una de esas creencias que tenemos arraigadas dentro de nuestro ser. En segundo lugar, trabajarlas y pasarlas al polo positivo.
Es más: algo que aprendí con mis mentores es que a veces no salen a flote de una manera simple, sino que hay que darles vuelta y entender qué está pasando realmente o qué estamos sintiendo.
También te invito, si te parece bien, a deshacerte de esas creencias negativas, agradeciendo y soltando, puedes romper el papel o quemarlo, como más te guste, como haciendo un pacto contigo mismo sobre eso. Ya lo dejamos ir y, en muchos casos, ir muy lejos.
Te voy a hacer una pregunta muy importante: ¿a qué le dedicas tu tiempo, si pudieras describirlo, a qué sería? Y ahora vamos a profundizar un poco más: ¿a qué le dedicas más tiempo, en qué estás más enfocado?, ¿en todo lo que tienes y agradeces o en lo que te falta?
Este es un hermoso juego de la mente en el que se enfoca la mayor parte del tiempo. Quizás no sea tu caso pero sí te puedo asegurar que es el caso de la mayoría. Y te voy a explicar por qué, excepto que seas parte de ese pequeño porcentaje de la población mundial que fue programado desde pequeño, con paradigmas de abundancia y saben la verdad, porque esta es la verdad: lo que realmente hay para todos y lo creadores que somos como seres humanos, que existe la energía y todos estamos hechos de energía y todo lo que nos rodea también y podemos materializar y crear todo lo que deseamos.
Pero en vez de eso, crecimos en cierto país, rodeados de cierta cultura, en cierta famia y aprendimos desde que estuvimos en la panza de mamá, m programas y paradigmas que nos marcan, la mayoría son de escasez, carencia, no hay para todos, todo no se puede, siempre hay que elegir una cosa, no puedes tomar varias, etc.
Así fuimos creciendo en entornos donde hubo mucho amor o no, cuidados o no, pero donde nuestros padres hicieron lo que sabían igual que sus padres, nuestros abuelos y así hacia el infinito del árbol famiar. No estoy aquí para que juzguemos a nadie. Cada uno hizo todo lo que tenía a su alcance y seguro dieron lo mejor que tenían, pero sí a lo largo de los siglos venimos aprendiendo eso, ¿qué resultados vamos a tener? Dicen que somos radios que emitimos frecuencias por nuestros pensamientos.
Imagínate todos esos programas en tu mente subconsciente —de algunos te puedo asegurar que ni siquiera eres consciente ahora— pero ahí están esperando arremeter cuando surja la posibidad.
Vayamos al hueso.
¿Cómo hacemos para sostener nuestro enfoque y llegar a nuestras metas?
Te lo cuento en estos pasos, ponlos en práctica, ya que a mí me ayudaron mucho. Sostener tu enfoque para lograr tus metas puede ser todo un desafío, pero existen varias estrategias efectivas que puedes utizar para mantenerte encaminado.
Aquí te presento algunas:
• Visualiza el resultado final. Tómate el tiempo para visualizar claramente el resultado final que deseas alcanzar. Imagina cómo se verá, cómo se sentirá y qué significará para ti lograr tus metas. Mantener esta imagen en mente te ayudará a mantener tu enfoque y motivación. Todos los días, todo el tiempo que puedas hacerlo, llévate un recordatorio en tu celular, en tu agenda, en tu bletera, en donde lo veas muchas veces en el día.
• Establece metas claras y específicas. Define metas claras, específicas y alcanzables que te ayuden a dividir tu objetivo principal en pasos más manejables. Establecer hitos a lo largo del camino te permitirá medir tu progreso y mantenerte motivado mientras avanzas hacia tus metas.
• Prioriza tus tareas. Identifica las acciones más importantes y urgentes que necesitas realizar para avanzar hacia tus metas y concéntrate en ellas. Prioriza tus tareas diarias en función de su importancia y su contribución al logro de tus objetivos.
• Elimina distracciones. Identifica y elimina las distracciones que puedan desviar tu atención de tus metas. Esto podría incluir desactivar las notificaciones del teléfono, establecer horarios específicos para revisar el correo electrónico o trabajar en un entorno libre de distracciones.
• Crea un plan de acción. Desarrolla un plan detallado que te guíe en el proceso de alcanzar tus metas. Divide tus objetivos en pasos específicos y establece un cronograma realista para completar cada tarea. Tener un plan claro te ayudará a mantener tu enfoque y a mantenerte organizado.
• Cultiva la disciplina. Desarrolla hábitos y rutinas que te ayuden a mantener la disciplina y la consistencia en la búsqueda de tus metas. Comprométete a tomar acciones consistentes y a seguir tu plan de acción, incluso cuando te enfrentes a desafíos o contratiempos.
• Recompénsate por tus logros. Celebra tus logros y tus avances a lo largo del camino. Reconoce tu progreso y date recompensas por tus esfuerzos, ya sea con un pequeño regalo, tiempo de descanso o simplemente palabras de aliento para ti mismo.
• Mantén una mentalidad positiva. Cultiva una mentalidad positiva y optimista que te ayude a superar los obstáculos y los contratiempos que puedas encontrar en el camino. Enfócate en lo que puedes controlar y busca soluciones en lugar de centrarte en los problemas.
Al incorporar estas estrategias en tu vida diaria, estarás mejor equipado para mantener tu enfoque y avanzar de manera constante hacia el logro de tus metas. Recuerda que la perseverancia y la determinación son clave para alcanzar el éxito a largo plazo.
Si empiezas a hacer una observación sobre a qué le dedicas tu tiempo, te puedo asegurar que vas a observar una herramienta poderosísima para saber exactamente dónde estás parado y por qué.
Cuando empezamos a ser conscientes de lo que estamos haciendo -y la pregunta es para qué le estoy dedicando tiempo a esta actividad, a este pensamiento- te vas a dar cuenta de todo lo que tienes para modificar porque en la mayoría de los casos, no te lleva a crear más ni para ti ni para tus sueños.
Coach cuántica, mentora y autora de “Saltando al vacío”, publicado recientemente por Editorial Planeta. (@lauperezsaade)
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