Enterró 30 lingotes de oro de 24 quilates en una playa y quien los encontrara se los podía quedar: regaló miles de dólares

Conocé cómo se llevó a cabo esta búsqueda y por qué un artista decidió organizarla.

El artista aleman Michael Sailstorfer escodnió varios lingotes de oro en una playa inglesa.

Gran parte de las historias de tesoros perdidos comienzan porque alguien quiere proteger sus bienes de agresores. Sin embargo, uno de los casos más recientes demuestra todo lo contrario: Un artista alemán escondió 30 lingotes de oro en una playa con el objetivo de atraer personas a un festival artístico.

Michael Sailstorfer, el responsable de esta búsqueda, es un artista alemán que selecciona objetos de uso cotidiano y los utiliza en su arte para situarlos en un plano entre romántico y surreal. Por ejemplo, en una de sus obras más conocidas tan solo utiliza neumáticos que forman grandes nubes negras.

Lingotes de oro escondidos en la arena: la búsqueda del tesoro

En 2014, Michael Sailstorfer enterró 30 lingotes de oro de 24 pilates en una playa de Folkestone, en el condado de Kent, Inglaterra. Estas estarían disponibles para cualquier persona que las encontrara. El objetivo de esto era promover un festival local, lo que funcionó correctamente, ya que la propuesta trajo a cientos de participantes.

Cada lingote tenía un costo de 530 dólares, por lo que la sumatoria casi alcanzaba los U$D17.000. El periódico The Guardian había publicado la noticia a las 12:45 de ese día, en la que se explicó que el oro estaría disponible a partir de las 16 horas. No había llegado la hora todavía y ya 50 personas estaban excavando o pasando el detector de metales por la arena. Se estima que para las 18 horas había casi 200 personas.

A pesar de que varios participantes se fueron porque creyeron que era una mentira, otros se quedaron hasta que la marea volvió a subir. Los organizadores del evento afirmaron que esto fue una obra de arte en sí misma. A pesar de que no se sabe con certeza si alguien encontró un lingote de oro, esta experiencia dejó un mensaje sobre el futuro de la industria de Folkestone, ya que antes la playa en la que se excavó solía ser un puerto comercial.