La Costanera Norte se reinventa con la apertura de nuevos locales

Entre la puesta en valor de los espacios verdes y los nuevos restaurantes que se alzan frente al rio, la Costanera Norte se transformó en una propuesta para el disfrute.

Tigre Morado es una de las propuestas gastronómicas que se alza frente al rio.

Durante años, la Costanera Norte fue sinónimo de carritos de sándwiches de bondiola, restaurantes clásicos y pescadores al borde del río. Sin embargo, en los últimos tiempos, esta zona ribereña comenzó a experimentar un proceso de renovación que la está transformando en un polo gastronómico y de esparcimiento cada vez más activo.

La apertura de nuevos locales, como un salón de eventos, nuevos restaurantes de moda y la puesta en valor del espacio público posicionan a la Costanera como uno de los lugares en auge de la Ciudad de Buenos Aires.

El año pasado, se inauguró en Costanera Norte el parque costero, un espacio verde de tres hectáreas ubicado frente al rio, a corta distancia de los nuevos restaurantes. Los fines de semana se observa a la gente disfrutar del espacio, el cual es ideal para andar en bicicleta y conectarse con el rio.

Nuevos locales gastronómicos levantan la zona

Desde enero comenzó a haber una serie de aperturas de renombre. La más reciente, es la de un impresionante edificio ondulado, inspirado en el oleaje y la marea del Río de la Plata. Se trata de Fabric Dragón Blanco y Tigre Morado Costanera, dos propuestas que invitan a los comensales a viajar con sus sabores. Lo primero que se ve al ingresar a Fabric es un imponente dragón de más de 20 metros de largo, que se extiende por todo el interior del salón. En la mitología japonesa el dragón es el guardián de las aguas, un viajero incansable entre continentes. Allí, se ofrece un viaje culinario por los mejores sabores de Asia, con una sofisticada carta de street food, sushi, pescados y pollo, entre otros. Tanto en la barra como en la mesa, se puede disfrutar de una experiencia omakase, término japonés que significa “lo dejo en tus manos”: una invitación a entregarse al recorrido de sabores.

En tanto, en Tigre Morado la propuesta acerca a los sabores de la selva, la sierra y el mar peruanos. Se trata de un restaurante de alta calidad. Entre los platos destacados hay tapeos y entradas como ceviches y tiraditos (el de trucha con salsa de ostras y jugo de limón es uno de los favoritos); rolls y nigiris, diversas pescas, pulpo, currys, entre otros. Ambos restaurantes se destacan por su cocktelería.

Este año, también abrió en Costanera Norte, Malloys. El restaurante ofrece una experiencia gastronómica al estilo de una playa. Hermano del local pionero en San Isidro, esta apertura recrea el mismo ambiente en una ubicación privilegiada y con hermosas vistas. La carta es amplia, con propuestas de parrilla, comida italiana y asiática. Además ofrece merienda y brunch.

Otra de las novedades de la zona es Costa 7070, comandado por los conocidos Pedro Barguero e Inés de los Santos. Allí se destacan la gastronomía, la coctelería y la música que acompañan al lugar. A diferencia de las otras propuestas de la zona, Costa 7070 ofrece una carta orientada a la gastronomía española, donde la pesca es uno de sus pilares.

Y por último, Enero. No es nuevo, pero es una propuesta importante de la costanera. Es también un restaurante moderno, con una ambientación selvática y como su nombre lo indica, traslada a los comensales a enero, época de vacaciones. Ofrece una carta variada, con productos y platos locales, como otros más elaborados.

Mientras nuevas propuestas cambian el paisaje frente al rio, se complementan también con los locales ya existentes, históricos restaurantes y los carritos de carne para quienes van en busca de un plan económico.