¿Oído tapado? Conocé los mejores trucos de los otorrinos para aliviar el dolor

Estos trucos son fáciles, rápidos y con elementos de la casa. Conocé los detalles.

El dolor de oído es común entre aquellos que utilizan hisopos. 

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Tener los oídos tapados o con exceso de cera dificulta la audición, algo muy molesto para la vida cotidiana. Por lo general estos síntomas se dan en consecuencia de la utilización de hisopos, o por la incorrecta limpieza de los oídos.

Por suerte existen ciertos trucos caseros, recomendados por otorrinos, que pueden ayudar con este problema. Estos son fáciles, rápidos y con cosas de la casa. Igualmente, ante algún fuerte dolor o una gravedad se recomienda visitar a un médico especialista.

Los mejores trucos para destapar oídos

1. Agua y sal

En una taza, mezclar una cucharada de sal con agua y revolver hasta que se disuelva. Luego, humedecer un pedazo de algodón en la mezcla y dejar caer unas gotas en el oído. Inclinar la cabeza durante 3 minutos para que el agua llegue al interior. Por último, realizar el movimiento inverso para que drene y limpiar la parte exterior para remover la cera blanda.

2. Agua estéril

Ingresar agua estéril tibia en una jeringa, y solicitar que otra persona con buen pulso inyecte el líquido dentro del oído tapado. Es importante no darle demasiado impacto al introducir la sustancia. En unos minutos, el cerúmen caerá.

3. Agua oxigenada

Colocar en un recipiente partes iguales de agua tibia y agua oxigenada (peróxido de hidrógeno al 3% o menos). Con un gotero llenar el oído afectado y dejar actuar por 3 a 5 minutos. Inclinar la cabeza para sacar el líquido y enjuagar el oído con agua tibia.

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4. Té de manzanilla

En un algodón mojar una infusión de manzanilla. Luego, echar 3 gotas adentro del oído y dejar que el liquido haga efecto por unos 20 minutos con la cabeza inclinada. Finalmente, incorporarse. Esto ablandará la zona.

5. Gotas óticas

Las gotas anticeruminosas suelen ser recomendadas por los especialistas para los casos en los que el oído está muy tapado. Estas gotas logran que se ablande la zona para posteriormente extraer la cera mediante aspiración y visión microscópica. Sin embargo, si el cerumen es leve, puede deshacerse con la sola aplicación de la sustancia otológica. Deben echarse 4 o 5 gotas, 4 veces al día. Se aconseja no colocarse ningún algodón ni utilizar hisopos en el oído.