Argentina es, mundialmente, el país con más mascotas por hogar, por lo que es muy común tener un perro, un gato, una tortuga o el animal que más les guste en la familia. Hay una importante cultura al rededor de este fenómeno, y se enseña desde jóvenes a los más chicos cómo portarse y cómo tratar bien nuestro amigo peludo en cuestión para darles una casa feliz donde se sientan seguros.
¿Tenés una mascota? Acariciarla te ayuda a cuidar tu salud mental por este motivo
SI te encanta pasar tiempo con tu mascota y no sabes por qué, los expertos tienen una explicación para eso.
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Sin embargo, ellos también nos hacen bien a nuestra salud aunque no nos demos cuenta. Verlos al llegar a casa después del trabajo da una inyección de felicidad, y siempre es relajante dormir una siesta con tu mascota a tu lado. Se le preguntó a expertos en neurociencia por qué ocurría esto en nuestro cuerpo, y hay una explicación muy sencilla detrás.
Por qué hace bien acariciar a nuestras mascotas
Tener una mascota puede ser una excelente manera de reducir el estrés. Acariciar a tu animal de compañía estimula la liberación de dopamina y serotonina, neurotransmisores que favorecen el bienestar y mejoran el estado de ánimo. Al mismo tiempo, se disminuye la producción de cortisol, la hormona responsable del estrés, lo que contribuye a un mayor equilibrio emocional.
Además, los animales pueden ser una gran fuente de apoyo para quienes sufren de ansiedad o depresión. La compañía de una mascota puede proporcionar un sentido de seguridad y tranquilidad, ayudando a calmar la mente y aliviar los síntomas de estas condiciones. Tener un animal cerca fomenta también un sentimiento de apoyo social, reduciendo la sensación de aislamiento.
Cuidar de una mascota también favorece la sociabilidad y el establecimiento de nuevas relaciones. Caminar con un perro en público, por ejemplo, facilita la interacción con otras personas y crea oportunidades para fortalecer lazos sociales. Asimismo, la responsabilidad de atender las necesidades de un animal promueve la disciplina y la organización, lo que ayuda a mantenerse enfocado en las rutinas diarias. Además, las caricias y el contacto físico con tu mascota liberan endorfinas, lo que aumenta la sensación de felicidad.
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