Crece la preocupación por la salud del rey Carlos III: "Empeora día a día"

El monarca fue diagnosticado con cáncer a comienzos de 2024 y aseguraron en las últimas horas que este cuadro es "imparable".

Preocupación por la salud del rey Carlos III.

La salud del rey Carlos III de Inglaterra genera cada vez más preocupación en Reino Unido ya que aseguran que el cuadro de cáncer que fue diagnosticado a comienzos de 2024 es "imparable". La última información oficial que se conoció sobre el tema aseguraba que continuaría su tratamiento de quimioterapia en 2025 aunque la periodista española especializada en la realeza británica Pilar Eyre aseguró que el estado del monarca es peor que lo que dejan ver desde Buckingham. "Empeora día a día", advirtió.

Esta semana, Carlos estuvo junto a la reina consorte Camila en Polonia para conmemorar el 80 aniversario de la liberación del campo de concentración y exterminio nazi de Auschwitz-Birkenau, en el Día Internacional en Memoria de las Víctimas del Holocausto. Los médicos le habían aconsejado no viajar por su delicado estado de salud pero decidió seguir adelante con su agenda institucional.

Eyre remarcó que el monarca tiene buscará "seguir con sus obligaciones el mayor tiempo posible”, tal como dijo el día que juró como rey.

“El estado de salud de Carlos empeora día a día. Aunque no se publican en ningún medio serio, corren rumores que el avance de su cáncer es imparable“, aseguró la periodista en su blog Lecturas.

Qué se sabe de la salud del rey Carlos III

Por el momento, a un año del diagnóstico, todavía no se dio a conocer qué tipo de tumor maligno padece el Rey ni a qué tratamientos se está sometiendo. Según explica Eyre, la Casa Real Británica optó por mantener todo lo relacionado con su salud en la intimidad y revelan información poco comprometedora.

A su vez, Eyre se refirió al viaje que hizo en noviembre a Australia y contó: “Los médicos accedieron a regañadientes a interrumpir once días el tratamiento, pero el resultado fue un retroceso en su estado que hizo saltar las alarmas”, afirmó.

“A partir de entonces, solo mantiene audiencias cortas, todas en casa y muy medidas. Aunque la proliferación de imágenes, la mayoría retocadas, nos hagan pensar que su actividad es incesante”, continuó y agregó que “la situación es muy oscura”. Tan es así que afirma que durante en octubre se realizó una sesión fotográfica “con distintos atuendos para tener material inédito de archivo”.

En este sentido, Eyre compara la situación de Carlos III con la que vivió su abuelo, Jorge VI, padre de la reina Isabel II, para reforzar el hecho de que la Corona Británica prefiere “fingir que no pasa nada hasta el último momento”. Y es que, pese a que Jorge VI tuvo un “cáncer muy agresivo” y murió pesando “50 kilos”, su fallecimiento se anunció de la siguiente manera: “El rey se acostó en perfecto estado de salud y murió de un infarto mientras dormía".