Se celebran nuevas elecciones en Estados Unidos, las cuales enfrentan de forma directa a la demócrata Kamala Harris y al republicano Donald Trump. Este año, las votaciones se perfilan indecisas y tensas, con definiciones de último momento.
5 de noviembre 2024 - 08:18
Elecciones en Estados Unidos 2024: geopolítica y comercio, ¿cuál es el candidato favorito de China, Rusia, Israel y la Unión Europea?
El resto del mundo se encuentra expectante ante unos nuevos comicios en el país norteamericano. Todo indica que los resultados serán muy parejas.
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El resto del mundo se encuetra expectante de lo que vaya a suceder en EEUU.
Mientras que Trump concluyó su mandato en 2021, Harris es la vicepresidenta desde aquel entonces, reflejando una profunda polarización en el país. El mundo permanece atento a los resultados, ya que sus intereses también se juegan ahí. Por eso mismo, la neutralidad suele ser inexistente.
Elecciones en Estados Unidos: qué se espera en Rusia
En el caso de la guerra entre Ucrania y Rusia, la diferencia entre Harris y Trump es muy marcada. Ante una victoria demócrata, lo más probable es que las políticas respecto a este conflicto sigan siendo las mismas que se vienen tomando bajo el mandato de Joe Biden, y que se mantenga la lejanía con algún tipo de acuerdo.
Este último, fue cuestionado en diversas ocasiones por su posicionamiento, ya sea por involucrarse demasiado, para algunos, o por no haber hecho lo suficiente, para otros. Sin embargo, en mayor medida supo mostrarse como opositor a la administración rusa.
Por esto mismo, Putin aboga mayormente por una victoria de Donald Trump antes de que Harris. Es que el ruso especula con que el primero insistirá más en un posible acuerdo para ponerle fin a la guerra, favoreciendo a Rusia y dejando gran parte del territorio en disputa de su lado.
La visión de Ucrania
En el caso ucraniano, la situación es exactamente a la inversa, ya que allí ruegan una victoria de Kamalla Harris. Es que, de ganar Trump y pactar con Putin, Ucrania podría resultar seriamente perjudicado bélica y territorialmente. Es que el apoyo fundamental para mantenerse en pelea se terminaría
Además, no ven posible que Volodimir Zelenski pueda resistir a una presión estadounidense de dar por concluida la guerra, prefiere mantener el diálogo de apoyo que mantiene hasta ahora con Biden.
La única esperanza que tienen desde Ucrania si no ganan los demócratas, es recordar que Trump aprobó, en 2019, la venta de misiles antitanques Javelin, con los que pudieron reforzarse.
Qué prefiere la Unión Europea
La gran mayoría de los líderes europeos se inclinan por una victoria de Kamala Harris, con el español Pedro Sánchez a la cabeza. En el lado opuesto, el de apoyo a Trump, el máximo exponente sería Viktor Orbán, el primer ministro de Hungría.
Es que, desde Europa, sostienen que ante una administración de Trump, la primera orden del día que recibirían sería que todos los miembros de la OTAN destinen el 2% de su PIB a defensa. A ese presupuesto, por ejemplo, España destina el 1,28%.
Por otro lado, desde el viejo continente también sienten que deben prepararse para los aranceles comerciales en caso de una victoria republicana, por eso, en su mayoría, optan por Kamala. Además, sienten que Trump rompe con el orden internacional establecido con enorme peligrosidad.
No obstante, bajo el Gobierno de Netanyahu, una administración de Harris probablemente tendría menos influencia que la que tendría un gobierno de Trump sobre Zelenski en Ucrania.
A quién elige China
Desde China prefieren que salga triunfante Kamala Harris, ya que les resultaría impredecible lo que generaría una victoria de Trump. Es que, al ser un país que apuesta por la planificación a largo plazo, el republicano poco ortodoxo obstaculiza todo eso.
Además, Pekín sabe que se avecinan aranceles gane quien gane, pero una administración de Harris, con su deseo de ser razonable con todos los interlocutores, sería mucho más adecuada para Xi Jinping.
La postura de Israel
Otro país en guerra y muy dividido ideológicamente es Israel. Allí, en su propia polarización, el sector más progresista prefiere una victoria de Harris, mientras que la derecha implora que gane Trump.
El candidato republicano es abiertamente partidario de Benjamin Netanyahu, y sus opositores le temen a las hostilidades que puedan llegar a derivar de esa alianza.
En cambio, la derecha israelí le teme una victoria demócrata, ya que esto ejercería presión sobre el Estado judío para que ponga fin a la guerra en la Franja de Gaza, busque una solución de dos estados con los palestinos y se enfrente, potencialmente, a un regreso de la Embajada de Estados Unidos a Tel Aviv desde Jerusalén.
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