Honduras y Guatemala desarrollan campañas de recepción de los deportados de EEUU

Trump declaró el estado de emergencia nacional en la frontera con México, donde también desplegaron políticas de recepción.

Con la llegada de Trump, Estados Unidos comenzó con las deportaciones masivas.

AFP

El gobierno de Honduras anunció este sábado que recibirá a los ciudadanos que sean deportados o repatriados de Estados Unidos, en el marco de las políticas antiinmigración que adoptó el recién asumido a la presidencia, Donald Trump. Por su parte, Guatemala confirmó el arribo de 79 personas a su país durante la madrugada.

Durante su campaña, el republicano había descripto a los migrantes como "salvajes", "animales" o "criminales", y prometió la mayor campaña de deportación de la historia de Estados Unidos, en donde viven alrededor de 11 millones de personas en situación irregular.

Honduras y Guatemala reciben a los deportados

En el caso de Honduras, el canciller Enrique Reina confirmó el apoyo para los deportados: "La idea es recibirlos con los brazos abiertos, son nuestros compatriotas y en eso tendremos que coordinar con los Estados Unidos lo necesario para recibirlos de la manera más adecuada, humanitaria y segura".

En ese sentido, reveló que la presidenta Xiomara Castro desarrollará un programa titulado 'Hermano, hermana, vuelve a casa', cuyo fin es proveer a los hondureños que regresan ciertos recursos para movilizarse, alimentación y luego facilitarles empleos.

Asimismo, detalló que el primer paso será el de un bono solidario -sin precisar el monto- para que puedan movilizarse y adquirir alimento. Después, buscarán "impulsar un programa de empleo masivo que ya está desarrollando la presidenta".

Según datos del estadounidense Centro de Información y Acceso de Registros Transaccionales (TRAC, por sus siglas en inglés), en la nación norteña hay 488.397 hondureños que se encuentran en listas con orden de deportación. Desde la Cancillería del país, repliegan: "El objetivo es darle todos los insumos a los hondureños para que se sientan bienvenidos en casa y sientan que se puedan desarrollar de nuevo en Honduras".

Por el lado de Guatemala, el Instituto Guatemalteco de Migración (IGM), informó acerca del despliegue de sus equipos en el Centro de Recepción de Retornados, para recibir un vuelo procedente de Estados Unidos, el cual aterrizó en horas de la madrugada de la jornada.

Bajo este marco, en el vuelo retornaron alrededor de 79 guatemaltecos, 31 mujeres y 48 hombres, procedentes de un vuelo desde Laredo, Texas, a los cuales les fue brindada la atención necesaria para corroborar su protección y salud. Danilo Rivera, director del IGM, manifestó: "Este es un esfuerzo del Gobierno del Presidente Dr. Bernardo Arévalo y la Vicepresidenta Karin Herrera, con el cual, en coordinación con distintas instituciones, buscamos conocer las necesidades y capacidades de las personas retornadas".

La portavoz de la Casa Blanca celebró un récord de deportados en Estados Unidos

Karoline Leavitt, portavoz de la Casa Blanca, desmintió informes que señalaban que México había rechazado un vuelo militar estadounidense con migrantes deportados. Según la funcionaria, el país latinoamericano no solo ganó los vuelos, sino que estableció un récord al recibir cuatro en un solo día, el pasado 23 de enero.

Leavitt, en un mensaje publicado en X (exTwitter), expresó: "Gracias al presidente Trump: ¡Ayer, México obtuvo un récord de cuatro vuelos de deportación en un día! (...) México también ha movilizado a 30 mil guardias nacionales".

El reporte inicialmente divulgado mencionaba que un avión C-17 de la Fuerza Aérea de Estados Unidos con destino a México no despegó debido al rechazo del gobierno mexicano. Sin embargo, fuentes del Departamento de Defensa estadounidense indicaron que dos aviones similares, con unos 80 migrantes cada uno, partieron hacia Guatemala.

En respuesta, la Secretaría de Relaciones Exteriores de México negoció cualquier conflicto, asegurando que las relaciones con Estados Unidos se mantengan bajo un esquema de cooperación y respeto mutuo. "Tratándose de repatriaciones, siempre aceptaremos la llegada de mexicanos y mexicanos a nuestro territorio con los brazos abiertos. México te abraza", señaló la dependencia liderada por Juan Ramón de la Fuente.

México se prepara para recibir a deportados

En México, la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo reiteró que su administración está lista para recibir a cualquier connacional deportado, independientemente de su estatus migratorio. “Cuando lleguen a México ya hay un programa integral que tiene que ver con apoyos de Bienestar, ingreso al IMSS, empleo, transporte para que puedan llegar a sus lugares de origen, un pequeño apoyo inicial que les permita llegar si llegan sin recursos” , explicó desde Palacio Nacional.

Entre las medidas implementadas, el gobierno mexicano contempla la incorporación de los deportados al Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y su acceso a programas del Bienestar. La estrategia también incluye apoyo para transporte y empleo con el objetivo de facilitar su reintegración en sus comunidades de origen.

La administración estadounidense prevé mantener el ritmo de deportaciones en los próximos días, reforzando las acciones de seguridad fronteriza. Mientras tanto, México reafirma su compromiso de recibir a sus ciudadanos con los recursos necesarios para garantizar su bienestar y reintegración al país.