El presidente de EEUU, Donald Trump, convocó a una reunión de secretarios este jueves para discutir el papel de Elon Musk y sus esfuerzos en reducir el gasto del gobierno y sus empleados. Según medios locales, se trató de una reunión con discusiones acaloradas.
La difícil posición de Donald Trump frente al malestar en su gobierno por los recortes que impulsa Elon Musk
La Casa Blanca vivió una reunión de secretarios de la administración Trump. Allí se discutió el papel del magnate y su "motosierra".
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Durante meses se ha especulado en Washington si la asociación entre Trump y Musk podría fracturarse.
Musk acusó al secretario de Estado, Marco Rubio, de no despedir la cantidad suficiente de personas de su departamento, según el New York Times. El magnante apuntó al secretario con que él salía "bien en televisión", de acuerdo al diario estadounidense, pero evitando cualquier alusión positiva sobre su trabajo como jefe de la diplomacia.
La difícil posición de Donald Trump frente a los recortes de Elon Musk
Según el periódico, el multimillonario también discutió con el secretario de Transporte, Sean Duffy, sobre si los empleados de la oficina de Musk trataron de despedir más controladores aéreos cuando ya hay una escasez de personal en la Administración Federal de Aviación.
Luego de escuchar a ambas partes, según testigos, el presidente señaló que él apoya el trabajo de DOGE, pero que ahora serán sus secretarios del despacho los que estarán a cargo de esos despidos, mientras que el equipo de Musk solo aconsejará cómo se deben hacer.
Un vocero del departamento de Estado dijo al NYT que para Rubio la reunión fue una "discusión abierta y productiva".
Cambio de camino
La reunión deja entrever que Trump decidió restringir el poder de Musk y el DOGE para recortar los gastos del gobierno. En su cuenta de la red social "Truth Social" dijo que instruyó a sus secretarios a trabajar con departamento de eficiencia en las "medidas necesarias para reducir los costos".
"Como los secretarios conocen mejor a las personas que trabajan en cada departamento, ellos pueden decir con precisión quien se queda y quien se va", escribió. "Debemos usar un bisturí, no un hacha", añadió.
Hace solo unas semanas, Musk usó una motosierra en un evento político, símbolo de sus empeños por cortar el gasto del gobierno. Esto enfureció a los demócratas y preocupó a algunos funcionarios de la administración.
Evitar la justicia
Se sospecha que esta acción de Trump puede ser una forma de evitar que su administración sea demandada legalmente debido al poder que tiene la oficina de Musk, quien a diferencia de los secretarios de gobierno, no está sujeto a la aprobación de su puesto en el Senado.
Durante meses se ha especulado en Washington si la asociación entre Trump y Musk podría fracturarse. El viernes por la noche, Musk fue visto abordando el Air Force One con el presidente para un vuelo de fin de semana a la casa de Trump en Mar-a-Lago en Florida.
Si bien los cruces en la sala del gabinete puede ser una primera grieta, Trump todavía apoya los esfuerzos y objetivos de Musk, incluso aunque en los próximos días prefiera usar un bisturí y no una motosierra.
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