Alimentos: la belga Puratos hace una inversión adicional en la Argentina para sustituir importaciones de Brasil

La foodtech amplía la fabricación de rellenos para pastelería en su planta de El Talar. Destinó u$s1 millón para la línea de producción y sumó 5 empleados.

Puratos tiene su planta en Talar de Pacheco. Allí produce para abastecer a la industria local y también para exportar.

La foodtech (empresa de alimentos con base tecnológica) Puratos anunció que aumentará sus inversiones en Argentina para ampliar la producción de rellenos para pastelería, de manera de sustituir productos que actualmente llegan desde Brasil y Chile.

Puratos es una compañía de origen belga, que se dedica a fabricar y proveer insumos y tecnología para las industrias de panificados, repostería y chocolates.

Ahora acaba de anunciar que destinará una inversión adicional de u$s1 millón para ampliar una nueva línea de producción de rellenos de pastelería en la planta que posee en Talar de Pacheco. Además de reemplazar con producción propia algunos productos importados, la nueva línea le permitirá concretar el ingreso a Brasil, tal como tenía previsto para este año.

La nueva línea de producción, que incluye opciones de rellenos frutales y brillos sin sabor ya está operativa y ha generado 5 puestos de trabajo nuevos. Así el total de empleados de Puratos en Argentina llega a 120 personas.

"Importar rellenos presentaba desafíos importantes, especialmente en términos de costos. Ahora, con la producción local, ganamos una ventaja competitiva que no solo beneficiará al mercado local, sino que también abrirá nuevas oportunidades en Brasil, un mercado con una demanda potencial significativa. Estimamos que el mercado brasileño podría absorber hasta un 15% de nuestra producción", destacó Alejandro Axelrud, gerente de Finanzas, Administración e IT de Puratos para Argentina, Paraguay y Uruguay.

El grupo belga cuenta con más de un siglo de historia y tiene presencia en más de 100 países, entre ellos Argentina. "Esta inversión abre un nuevo capítulo para la industria pastelera en nuestro país. Hasta ahora, los rellenos de pastelería eran mayoritariamente importados desde Brasil y, en algunos casos, llegaban desde Chile. Con esta nueva línea de producción, los pasteleros argentinos ahora cuentan con una opción local, lo que representa un avance significativo para el sector", añadió Axelrud a Ámbito.

Alejandro Axelrud, gerente de Finanzas, Administración e IT de Puratos para Argentina, Paraguay y Uruguay.

La sustentabilidad en la producción de alimentos, una demanda que crece

Según un informe de la consultora Fact.MR, el mercado global de rellenos de pastelería fue valorado en u$s1.200 millones en 2023, con una proyección de crecimiento gradual hasta alcanzar los u$s2.000 millones en la próxima década.

Este informe también refleja la evolución de una tendencia global creciente: los consumidores están preocupados por su bienestar físico y desean conocer el origen de los alimentos que consumen.

De hecho, según el estudio Taste Tomorrow -un reporte con información cualitativa y cuantitativa que elabora Puratos en base a datos de más de 50 países- el 66% de los consumidores a nivel mundial están interesados en la procedencia de sus alimentos, un porcentaje que se eleva al 78% en Sudamérica.

"Nuestros clientes demandan productos que sean sustentables y cumplan con las más estrictas normas de calidad. Nuestros rellenos, hechos a base de frutas naturales provenientes de La Patagonia, no solo son saludables, sino que también cuentan con una trazabilidad que garantiza nuestro compromiso con la producción responsable", explicó sobre este punto Axelrud.

Según las cifras de Puratos, el relleno de manzana es el más demandado en la nueva línea, aunque también se sumaron sabores como el de frambuesa. Por eso, la compañía sostiene sus planes de seguir ampliando la oferta según la demanda de la industria local y regional.

Esta tendencia se alinea con el objetivo global de Puratos de que, para 2030, la mitad de sus ventas provengan de productos enfocados en la salud y el bienestar.

A comienzos de este año, Puratos anunció una inversión de u$s7 millones para ampliar sus operaciones en el país con enfoque en productos saludables. La decisión toma en cuenta un relevamiento propio que indica que el 69% de los consumidores argentinos compra alimentos de origen vegetal y 78% compraría más en panaderías donde todo sea elaborado con ingredientes naturales.

Para Puratos, Argentina ofrece también un importante mercado de panes empaquetados, con un consumo que se mantuvo relativamente estable pese a los episodios de alta inflación que obligaron a la compañía a estrechar sus márgenes de ganancia.

Pero la apuesta por sostener las operaciones en Argentina a pesar del contexto económico desafiante tiene que ver con que Puratos ve este mercado con un potencial de crecimiento muy grande, más allá de la coyuntura.

La empresa belga evalúa que por el tipo de consumo y por el tipo de sociedad, Argentina debería llegar a porcentajes de crecimiento similares a los de Chile, Costa Rica o México, los mercados más relevantes que tiene Puratos en América latina.

Desde la planta ubicada en Talar de Pacheco, Puratos produce y exporta insumos hacia Perú, Chile, Uruguay y Paraguay. Este año, mediante la nueva línea de producción que ya está en funcionamiento, cumplirá su objetivo de poner un pie en Brasil.

Como parte de los proyectos asociados a la nueva línea de producción, Puratos inició negociaciones con productores de frambuesas de la Patagonia para desarrollar el concepto "field to fork" (del campo al tenedor) un concepto que implica garantizar la trazabilidad de las materias primas desde que se producen hasta que llegan a la mesa del consumidor.

Un objetivo en esa región es sacar provecho de la denominación de origen Patagonia para posicionarse internacionalmente, dado que es valorada mundialmente y también a nivel local. De hecho, el uso de Patagonia como denominación de origen en algunas industrias como la vitivinícola, ha generado controversias entre algunas bodegas que llegaron a los tribunales internacionales.

Por el momento, desde la Patagonia Puratos desarrolla el “topfil manzana”, un producto para que panaderos y pasteleros puedan acceder a la fruta de la Patagonia lista para usar en sus rellenos y con calidad premium. El producto se comercializa sólo en Argentina, pero hay acciones en marcha para llegar a Uruguay.