Fue un actor mega famoso, marcó a toda una generación con su personaje, y terminó en la quiebra tras haber sido millonario: qué pasó con Rubén Aguirre

A pesar de ser millonario, enfrentó una grave crisis financiera y problemas de salud que lo dejaron en la quiebra.

Rubén Aguirre perdió su fortuna tras un accidente y complicaciones de salud que lo dejaron en la quiebra.

Rubén Aguirre, recordado por su interpretación del querido “Profesor Jirafales” en “El Chavo del 8”, fue una de las figuras más conocidas de la televisión latinoamericana. Durante años, disfrutó de una vida de lujo, gracias a su éxito en la pantalla. Sin embargo, tras enfrentar diversos golpes personales y problemas de salud, terminó perdiendo toda su fortuna.

A pesar de su fama, la vida del actor sufrió un giro inesperado a raíz de un accidente automovilístico que cambió su futuro. Las dificultades económicas lo obligaron a vivir los últimos años de su vida en una realidad muy diferente a la que había conocido.

El “Profesor Jirafales” vio cómo su éxito en la televisión se desmoronaba tras una serie de golpes financieros y personales.

Cómo Rubén Aguirre, el actor que interpretaba al Profesor Jirafales, entró en bancarrota

A pesar de que su salario en los primeros años de la serie era modesto, rondando los 35 dólares mensuales, Rubén Aguirre logró disfrutar de una vida bastante cómoda. A medida que el programa se volvía más popular, sus ingresos aumentaron, aunque nunca alcanzaron las cifras millonarias de sus compañeros, como Roberto Gómez Bolaños (Chespirito) o Carlos Villagrán (Quico), quienes ganaban millones por su participación.

Al final de su tiempo en el elenco, el actor recibía alrededor de 700 pesos mexicanos al mes, una cantidad considerable para esa época, pero aún lejos de las cifras que llegaron a manejar algunos de sus colegas. Con estos números, el comediante logró mantener una vida cómoda gracias a su éxito en la televisión. Sin embargo, su suerte dio un giro inesperado tras un accidente de tráfico en 2007.

Mientras viajaba con su esposa, Consuelo de los Reyes Medellín, hacia Los Mochis, los frenos de su vehículo fallaron y se estrellaron contra un camión. Ella sufrió graves lesiones, incluyendo una fractura en la pierna derecha, y tuvo que ser hospitalizada. Aguirre también resultó herido, con una seria lesión en la columna vertebral. Este trágico evento marcó el inicio de una cadena de sucesos que afectaron su estabilidad financiera.

Los gastos médicos derivados de su accidente y las complicaciones de salud que surgieron después, como la diabetes y los cálculos renales, fueron un golpe duro para el actor. Poco a poco, el dinero que había acumulado en sus años de éxito comenzó a desvanecerse, dejándolo sin los recursos necesarios para cubrir los costos de su tratamiento. A pesar de su esfuerzo por mantenerse en actividad, el mexicano se vio obligado a abandonar los escenarios y enfrentó años de dificultades que lo llevaron a la quiebra.

La situación se agravó aún más cuando acusó a la Asociación Nacional de Actores (ANDA) de no brindarle el apoyo financiero adecuado. Aunque la organización defendió su apoyo, Aguirre no pudo recuperar su estabilidad económica. Finalmente, optó por dejar el hospital para evitar que su deuda aumentara, pero su situación ya era insostenible. Años después, en 2016, falleció en Puerto Vallarta, dejando tras de sí la historia de una caída inesperada de la fama y la fortuna.