Paraguay redobla su apuesta por atraer inversión argentina: infraestructura, energía y ciudades en expansión

La embajadora de Paraguay en Argentina, Helena Felip Salazar, analiza comercio, inversiones y desafíos bilaterales.

Helena Concepción Felip Salazar habbló de la relación bilateral entre Argentina y Paraguay.

En diálogo con Ámbito, la embajadora de Paraguay en Argentina, Helena Concepción Felip Salazar, analizó el buen momento del vínculo bilateral, las oportunidades para empresarios argentinos en su país, los proyectos de infraestructura, el crecimiento de sectores como el inmobiliario, farmacéutico y agroindustrial, y el rol clave de la colectividad paraguaya.

Periodista: ¿Cómo evalúa hoy el estado de la relación bilateral entre Paraguay y Argentina?

Helena Concepción Felip Salazar: La relación es altamente positiva, tanto en el plano diplomático como en lo comercial. Vemos un gran interés de empresarios argentinos por invertir en Paraguay, aprovechando las ventajas comparativas que ofrecemos: estabilidad macroeconómica, baja carga impositiva, poca burocracia y regímenes especiales dentro del Mercosur. Por ejemplo, empresarios de Tucumán me contaron que pudieron abrir una empresa en un solo día, sin contratiempos.

Un dato muy importante es que en lo que va del año, Argentina superó a Brasil como principal destino de exportaciones paraguayas. Tradicionalmente, por tamaño económico, Brasil era nuestro primer socio comercial, pero este año se revirtió y Argentina pasó al frente.

P.: ¿Cuáles son los objetivos actuales de la embajada en materia de comercio e inversiones?

H.C.: Nuestro objetivo es diversificar la balanza comercial. Hoy está concentrada en pocos rubros: la soja, que es estratégica, y la energía. Pero buscamos ampliar esa matriz sumando sectores como el cárnico, con la reciente habilitación para exportar carne porcina a Argentina, el farmacéutico, la caña paraguaya (una bebida alcohólica fermentada naturalmente, similar a la cachaça) y también rubros como el textil.

Queremos que los productos paraguayos estén presentes en los supermercados argentinos, porque así como nosotros consumimos productos argentinos, también buscamos que haya un ida y vuelta más equilibrado. Y en esto, el rol de las pequeñas y medianas empresas es central.

P.: ¿Qué sectores están en auge hoy en Paraguay para recibir inversión extranjera?

H.C.: El sector inmobiliario está viviendo una verdadera explosión. Hay muchas inversiones argentinas, porque nuestras principales ciudades están creciendo enormemente. En Asunción, por ejemplo, hay nuevos barrios en desarrollo y se ha triplicado la capacidad hotelera en los últimos años. También hay oportunidades en viviendas de clase media y desarrollos de alto lujo.

Otros sectores clave son el energético, no solo Yacyretá, también gasoductos, biotanol y mercado de carbono, el agroindustrial, el farmacéutico y el de innovación tecnológica. En un reciente foro con la Unión Industrial Paraguaya y empresarios argentinos, se destacó la posibilidad de desarrollar inteligencia artificial aprovechando la energía limpia y abundante que produce Paraguay.

P.: ¿Hay inversiones concretas en marcha desde Argentina?

H.C.: Sí, por ejemplo, una empresa tucumana vinculada a la caña de azúcar y al biotanol ya se instaló y está avanzando con proyectos en Paraguay. En Santa Fe hay unas 130 empresas que invierten en distintos rubros. La hidrovía y el Puerto de Rosario son claves para esta conexión. Además, estamos viendo más vínculos por vía aérea. Ya hay vuelos directos entre Asunción y Córdoba, Salta y Jujuy. Y se evalúan nuevos destinos, como Santa Fe, para acompañar este creciente flujo comercial.

"Nuestro objetivo es diversificar la balanza comercial", dijo la embajadora de Paraguay.

P.: ¿Cómo están trabajando en infraestructura para facilitar ese comercio?

H.C.: Tenemos varios proyectos estratégicos de integración física entre Paraguay y Argentina. Uno de los más relevantes es el corredor bioceánico, que conectará el Atlántico con el Pacífico atravesando Brasil, Paraguay y Argentina hasta llegar a los puertos de Chile. Esta ruta ya está construida en aproximadamente un 50% y será clave para agilizar el comercio con Asia. Su trazado atraviesa el Chaco paraguayo, pasando por Puerto Murtinho (Brasil), Carmelo Peralta (Paraguay), e ingresando a Argentina por la provincia de Salta.

En cuanto a pasos fronterizos, trabajamos en la modernización del cruce Pozo Hondo – Misión La Paz, que conecta el departamento de Boquerón (Paraguay) con la provincia de Salta. Allí se evalúa incluso la posibilidad de construir un nuevo puente. También se proyectan mejoras en el paso Clorinda – Puerto Falcón, un cruce clave entre Formosa (Argentina) y Presidente Hayes (Paraguay), donde avanzamos en un proyecto de modernización de la cabecera del puente, financiado a través del FOCEM, el fondo estructural del Mercosur.

Otro cruce en estudio es el de Pilar (Paraguay) – Puerto Cano (Argentina), que conectaría el departamento de Ñeembucú con el sur de Formosa. Este proyecto se encuentra en etapa de factibilidad con financiamiento de la CAF (Corporación Andina de Fomento). Además, en el paso Encarnación – Posadas, que une el departamento de Itapúa con Misiones, trabajamos con las direcciones de Migraciones de ambos países para agilizar el tránsito mediante tecnología, especialmente ante la creciente demanda por eventos internacionales, como el rally previsto en agosto en Paraguay.

P.: ¿Qué impacto tiene la comunidad paraguaya en Argentina en esa relación?

H.C.: Es enorme. Hay unos 900.000 paraguayos con DNI argentino, una comunidad ya muy establecida. Muchas familias tienen integrantes en ambos países. La colectividad paraguaya es trabajadora y respetada, y ha aportado mucho al desarrollo argentino. También hay un movimiento de retorno: paraguayos que se formaron en Argentina y ahora vuelven a Paraguay. Con este despegue económico que vivimos, queremos generar las condiciones para que quienes quieran volver encuentren posibilidades reales de inserción laboral y social.

P.: ¿Qué rol cumple el centro cultural paraguayo en Buenos Aires?

H.C.: Es nuestro único centro cultural en el exterior y queremos potenciarlo. En agosto vamos a inaugurar la muestra “Volver a Casa”, que refleja la historia de la migración paraguaya en Argentina. La idea es abrir el centro al público de forma permanente y que forme parte activa del circuito cultural porteño. También firmamos un acuerdo con Cosquín para que artistas paraguayos participen de ese festival. Hace 30 años que participamos en la Feria del Libro de Buenos Aires y queremos seguir fortaleciendo esos lazos a través del arte y la cultura.

P.: ¿Qué se puede esperar de la Expo Rural de Paraguay en julio?

H.C.: Es uno de los eventos más importantes del calendario económico del país. Se realiza en Mariano Roque Alonso, cerca de Asunción, y participan empresas de agroindustria, tecnología, alimentos y más. Hay rondas de negocios, charlas y stands institucionales. Además, es un evento familiar que suele recibir muchas visitas desde el litoral argentino.

También hay ferias relevantes en ciudades del interior como Santa Rita, en la frontera con Brasil. El volumen de negocios que se genera en estas exposiciones es muy significativo para nuestra economía. Estamos preparando una agenda intensa y vamos a difundir todos los detalles a través de nuestras redes.

P.: ¿Paraguay busca posicionarse también como destino turístico?

H.C: Sin dudas. Muchos argentinos visitan Paraguay por turismo de compras, especialmente en tecnología y artesanías, pero queremos expandir eso. El ecoturismo en el Chaco, con paisajes casi vírgenes, es un sector con gran potencial. También creció el turismo de convenciones, gracias a la nueva infraestructura hotelera y de eventos.

Además, con la CONMEBOL instalada en Asunción y el Mundial 2030, donde Paraguay será sede de partidos, esperamos una mayor inversión turística. La ubicación estratégica del país nos permite ser una plataforma regional para negocios y turismo.

P.: ¿Qué áreas considera prioritarias para una integración más profunda con Argentina?

H.C.: Además de los sectores tradicionales, queremos trabajar más en educación, salud, tecnología y formación profesional. Hay muchos paraguayos que estudian en universidades argentinas, públicas y privadas, y estamos promoviendo más cooperación en estas áreas.

Queremos que la academia y el sector productivo trabajen juntos, sobre todo en campos como la inteligencia artificial, energías renovables, farmacéutica y economía del conocimiento. Paraguay tiene energía, recursos humanos jóvenes y una economía en expansión. La Argentina tiene tradición científica, capacidad de innovación y empresas líderes. Juntos podemos avanzar hacia un desarrollo más equilibrado y complementario.