17 de diciembre 2024 - 00:01

Modernización del Régimen de Importación de Bienes Integrantes de Grandes Proyectos de Inversión

La medida es explicada bajo la premisa de considerarla un impulso para la competitividad industrial y la reindustrialización de país, habida cuenta los beneficios tributarios que ofrece

Benecios fiscales para importación de bienes industriales

Benecios fiscales para importación de bienes industriales

Por Andrea Zavatto (*) y Maria José Etulain Sórensen (**)

El Gobierno Nacional ha actualizado el Régimen de Importación de Bienes Integrantes de Grandes Proyectos de Inversión, originalmente instituido por la Resolución ME 256/2000, mediante la reciente Resolución ME 1319/2024.

Este cambio representa una oportunidad sin precedentes para las empresas argentinas, permitiéndoles acceder a beneficios tributarios clave para fortalecer su competitividad y expandir su capacidad productiva.

Beneficios tributarios al servicio de la industria

El régimen permite a las empresas importar equipamiento industrial sin pagar aranceles de importación, siempre que presenten y ejecuten un proyecto de inversión productiva aprobado por la Secretaría de Industria y Comercio. Esto incluye a empresas productoras de bienes o energía, desde grandes corporaciones hasta PyMEs, que hoy tienen acceso igualitario a estos beneficios.

Los bienes alcanzados incluyen:

  • Bienes de capital nuevos para conformar una línea de producción completa y autónoma.
  • Equipos destinados al tratamiento y eliminación de sustancias contaminantes.
  • Sistemas de almacenamiento automatizado inteligente.

Los proyectos elegibles abarcan:

  • Instalación de nuevas plantas.
  • Ampliación de capacidad productiva.
  • Diversificación de la producción.
  • Modernización tecnológica de plantas existentes.

El principal beneficio es la exención del pago de aranceles de importación, que hoy promedian un 12% para bienes de capital provenientes de países como Estados Unidos, Japón, China o Europa. Este ahorro directo puede ser calculado desde el inicio del proyecto, representando un punto de partida clave para diagnosticar la rentabilidad.

Por ejemplo: una empresa que importe una máquina para la preparación industrial de alimentos, clasificada bajo la posición arancelaria 8438.60.00 y originaria de Estados Unidos, debería pagar un arancel del 12,60%. Si el valor FOB de la máquina es de 145.000 dólares, y el bien integra una ampliación de capacidad productiva, será posible presentar un proyecto donde el ahorro inicial estimado sería de 18.270 dólares.

Modernización y agilidad en la tramitación

Uno de los aspectos más destacados de la actualización es la introducción del Certificado de Expediente en Trámite (CET), que permite a las empresas comenzar a importar bajo el régimen una vez presentada su carpeta de proyecto. Este mecanismo acelera significativamente los plazos y otorga mayor previsibilidad a las empresas.

Además, se establece un plazo máximo de seis meses para que la Autoridad de Aplicación tome una decisión final tras la rendición de cuentas, que debe ser presentada con firma de un profesional idóneo. Estos cambios simplifican el proceso administrativo, haciendo que el beneficio sea accesible incluso para empresas con menor experiencia en tramitaciones complejas.

Impulso a la reindustrialización nacional

Históricamente, este régimen ha beneficiado a grandes actores de la industria, como automotrices, laboratorios y molinos industriales. Con la modernización, se democratiza el acceso, ofreciendo una herramienta poderosa para que también las PyMEs impulsen su desarrollo importando bienes de capital de calidad.

La participación activa de las empresas en la gestión de sus casos, combinada con menores tiempos de respuesta y el acceso a tecnologías avanzadas, promete generar importantes ahorros, dinamizar la inversión y contribuir a la reindustrialización del país.

Pero no sólo los importadores argentinos se verán beneficiados con este régimen. Desde que es necesario articular el proyecto con componentes nacionales, también los productores locales deberían ver incrementadas sus ventas.

Conclusión

El Régimen de Importación de Bienes Integrantes de Grandes Proyectos de Inversión se consolida como una herramienta clave para fomentar la competitividad y el desarrollo industrial en Argentina. Las modificaciones recientes buscan agilizar los procesos, reducir costos y generar un impacto positivo en el entramado productivo nacional.

Este es el momento para que las empresas argentinas consideren la implementación de proyectos que aprovechen estas ventajas, contribuyendo así al crecimiento económico y la modernización de la industria local.

(*) Abogada. Especialista en Derecho Aduanero y Cambiario. Socia Directora a cargo de la oficina de Buenos Aires de MJE Comercio Exterior SRL.

(**) Abogada MBA. Especialista en Estrategias comerciales internacionales, y Marcos regulatorios multilaterales. Socia Directora a cargo de MJE International Trade and Consulting Services LLC (USA).

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