Argentina y la nube en 2025: cielo despejado

El pronóstico se presenta inmejorable de cara a 2025, para aquellas organizaciones de todas las industrias y de cualquier tamaño que decidan encarar un horizonte de transformación, innovación y nuevas posibilidades.

La nube es ahora, más que nunca , el único modelo que puede garantizar la escalabilidad, la flexibilidad, la eficiencia y la agilidad que la IA requiere para su despliegue. 

Después de un 2023 en el que las nuevas posibilidades de la IA generativa se instalaron con fuerza en el centro de la conversación, en 2024, muchas compañías empezaron a pasar lentamente de la atención a la acción y del qué al cómo.

Así, hoy, el pronóstico se presenta inmejorable de cara a 2025, para aquellas organizaciones de todas las industrias y de cualquier tamaño que decidan encarar un horizonte de transformación, innovación y nuevas posibilidades.

La nube: volver a las bases

Si bien la IA es el eje de una transformación que ya está empezando a mostrar su potencial, es clave volver a las bases y recordar que la nube actúa como habilitador de las nuevas soluciones. La nube es ahora, más que nunca , el único modelo que puede garantizar la escalabilidad, la flexibilidad, la eficiencia y la agilidad que la IA requiere para su despliegue. Y apostar a la nube, será por lo tanto, la clave para optimizar procesos, ganar en productividad y aumentar la competitividad.

Y si hablamos de la nube como habilitador de la IA, no podemos dejar de mencionar a los agentes virtuales. Estos asistentes inteligentes, impulsados por la nube y con la capacidad de comprender e interactuar en lenguaje natural, prometen ser la estrella del 2025. Gracias a ellos, las empresas podrán automatizar tareas, mejorar la atención al cliente, personalizar la experiencia de usuario y obtener información clave para la toma de decisiones de manera altamente eficiente. Los asistentes virtuales son capaces de responder preguntas complejas sobre productos, resolver problemas técnicos o incluso generar contenido creativo siguiendo simples instrucciones.

Adicionalmente, resultará fundamental enfocarnos en contar con datos de calidad para alimentar las nuevas estrategias en la nube ya que por su naturaleza de aprendizaje la información que nos brinde la IA será tan buena como los datos en los que se base. Finalmente, se requerirá avanzar decididamente en una transformación que es más cultural que tecnológica. No se trata tanto de discutir las ventajas de una solución u otra, sino de de invertir en talento especializado, repensar procesos, involucrar a la alta dirección y preparar mentalmente a los equipos para que puedan abrazar las ventajas de tecnologías que no solo permiten obtener el máximo valor de los datos, sino que pueden, además, adaptarse a las demandas de crecimiento y necesidades de cada negocio.

Una oportunidad transversal

Entre las industrias foco de nuestro país que se verán beneficiadas por las tecnología de IA y la nube, se encuentra el Agro : La maquinaría que actualmente se usa en el campo releva una enorme cantidad de información que, procesada adecuadamente, resulta valiosísima para la toma de decisiones. Desde la predicción del rendimiento de los cultivos hasta la detección temprana de plagas o la optimización de la logística y la distribución, son muchas y muy atractivas las posibilidades que se abren para este sector. Más allá del campo, la nube representa una oportunidad que es transversal a todos los sectores productivos y a todos los tipos y tamaños de organización.

Son muchas las áreas que pueden encontrar “terreno fértil” en la nube para potenciar sus negocios. Desde la personalización de experiencias de compra en el comercio minorista, o la toma de decisiones crediticias y el análisis de riesgo en la banca, hasta mejorar la atención de pacientes y diagnóstico por imagen en el sector salud, las soluciones impulsadas por IA serán, en 2025, herramientas clave para mejorar los resultados, la competitividad, la seguridad y la productividad de un amplio abanico de industrias y sectores.

Estamos ante un momento único para que tanto las grandes como las pequeñas y medianas empresas de Argentina se lancen a dar el salto de productividad que necesitan. Se trata, sin dudas, de experimentar con nuevas tecnologías, de adoptar una cultura de aprendizaje constante y de impulsar la innovación en todas las áreas de la organización.

Gerente general de Google Cloud Argentina