La amistad y la vida: las etapas que atravesamos con los hermanos por elección

¿Cuáles son los momentos de la vida en que desarrollamos el “sentir con otro”. De niños, adolescentes, la primera adultez y en la materinidad y paternidad.

Somos seres sociales desde muy temprano; en la vida los niños más pequeños descubren a sus pares tempranamente y se acercan para compartir, paulatinamente, la actividad principal de la infancia: el juego.

A este “hacer con otro” se va a sumar el “sentir con otro” con el desarrollo de la empatía. La familia juega un papel fundamental al alentar el contacto con el mundo y con los otros.

En la vida adolescente la amistad adquiere un valor protagónico: ante la necesidad de desarrollar la autonomía propia y respecto de la familia, el grupo de pares toma un valor principal. Con ellos se acercarán al mundo y a todo lo nuevo que éste les propone y que ahora sí pueden tomar porque ya se mueven y empiezan a decidir solos.

Las primeras experiencias ocurren en grupo, siguen “haciendo juntos”: deportes, salidas, viajes y también los primeros acercamientos físicos y amorosos. El grupo da el reconocimiento tan necesario para afirmar la identidad en construcción del adolescente.

Por esto en general adhieren a gustos musicales, formas de vestir y de pensar del grupo; es necesario pertenecer y sentirse acompañados en la difícil tarea de atravesar todos los cambios físicos y emocionales de esta edad y en la tarea de incluirse en el mundo adulto con todas sus complejidades.

Más adelante en la vida, cuando la identidad está mas afirmada, ya no es tan necesaria la mimetización con el grupo y se podrá “hacer con otros” tolerando las diferencias.

En la adultez, la amistad (los hermanos de la vida por elección) también se apoya en la capacidad empática, en el placer de compartir algo juntos y en poder no sentirse solos.

Luego de compartir las diferentes etapas de la vida, como la crianza de los hijos, cuando éstos parten es fundamental la compañía y la cercanía con los amigos como lo demuestran todos los estudios respecto a los efectos letales de la soledad y el aislamiento en la salud mental.

En esta etapa existe una intimidad particular, a veces sin palabras, pero poblada de los recuerdos y emociones de haber atravesado juntos los diferentes tiempos y avatares de la vida. Los amigos son entonces los interlocutores privilegiados de nuestra historia.

Médica Psiquiatra. Psicoanalista (APA). Terapeuta de pareja.