El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, viajó junto al Ministro de Economía, Luis Caputo, a la provincia de Córdoba. Durante la presentación del evento al que asistió -que no tenía nada que ver con el sector agropecuario- criticó a los productores rurales que aún no comercializaron su producción.
Guillermo Francos chicaneó a productores cordobeses y el campo salió al cruce
El jefe de Gabinete participó junto a otros funcionarios del ámbito nacional en la inauguración del proyecto de reversión del Gasoducto Norte. Una frase provocó el enojo de del sector rural.
-
Gobierno adelantó que "no está previsto" convocar a sesiones extraordinarias en el Congreso
-
Gobierno adelantó que antes de fin de año habrá licitación de la hidrovía
El funcionario detalló -mientras buscó la mirada cómplice del ministro- que en el viaje “vimos muchos silobolsa”, remarcando que había una buena cantidad de tenedores de granos que aún no se desprendieron de los mismos. Lo hizo delante de Caputo y del gobernador de Córdoba, Martín Llaryora.
Francos se refirió a la inversión del Gobierno nacional para financiar la obra vinculada a la energía y al “cambio de paradigma” tanto político como económico en el país. Explicó que “la segunda conversación más interesante del día fue con el gobernador Llaryora, mientras recorrían el tramo que une las localidades de Río Cuarto y La Carlota, cabecera del departamento Juárez Celman en la provincia de Córdoba.
“¡Muchas silobolsas vimos, ¿no?! Gente que todavía no liquidó, pero no importa, es un detalle…”, aseguró Francos. La respuesta del campo no tardó en llegar y desde la Comisión de Enlace de Entidades de la provincia le respondieron a través de un comunicado.
Concretamente, desde la Mesa de Enlace provincial destacó que “un simple comentario fue suficiente para que reaparecieran los mismos miedos que antes eran cotidianos y que, creíamos, habían desaparecido. Pensamos que con un Gobierno que se autodenomina libertario, no era necesario justificar como usamos nuestra propiedad o que destino damos a nuestros bienes de cambio. Creímos que de eso se trataba el respeto irrestricto de la propiedad privada que este Gobierno pregona. Pero vemos que no. Que la propiedad, cuando está en manos de productores agropecuarios, es distinta de la de los demás. Nosotros tenemos que vender nuestros productos cuando el Gobierno de turno quiere y al precio que decide, por supuesto como desde hace 20 años, a un precio disminuido por los derechos de exportación”.
Además, desde Córdoba, las entidades rurales aprovecharon para criticar la vigencia del RIGI -que el propio Caputo celebró la semana pasada- al recordarle al Gobierno que “a nosotros nadie nos incentiva para hacer las inversiones ni nos da un régimen especial, aun cuando invirtamos anualmente 10 veces más que los que reciben los incentivos”. Este punto es otro conflicto abierto con el Poder Ejecutivo, puesto que es sabido que el proyecto denominado RIDA, que se esta impulsando en el Congreso para las inversiones en el agro, si avanza será vetado por Javier Milei.
Quien buscó bajarle el tono a la discusión fue Nicolas Pino, titular de la Sociedad Rural Argentina. A través de su cuenta de X, aseguró que se había puesto en contacto con el funcionario y que hubo “coincidencias” en que “cuanto más silobolsas se vean mejor le irá al país porque habrá más producción y eso es trabajo, desarrollo y riqueza en las provincias”
Este punto es clave para la provincia de Córdoba, porque es la mayor productora de maíz del país, que es el grano que mas valor agregado genera. Es sin dudas la provincia donde desde hace tiempo se impulsa la transformación de las materias primas.
Por qué Francos “no la ve”
Una de las críticas a los dichos del funcionario se refiere a que, pese a las promesas, se mantiene “el mismo esquema extractivo de las anteriores administraciones”. La pregunta es si al gobierno de Milei sólo le importa la recaudación o si prefiere pensar en un modelo productivo donde el agregado de valor sea la bandera a enarbolar.
La semana pasada se conoció el dato de liquidación de divisas, que llegó al récord de los u$s2553 millones (+ 243% versus igual mes de 2023) según datos de la Cámara de la Industria Aceitera y el Centro de Exportadores de Cereales (Ciara-CEC). En lo que va del año, ya ingresaron al país divisas por u$s21.125.340.077, lo que implica una suba del 21%.
Si bien aún sorprende que en los altos estamentos aún se confundan los términos “liquidación” con “comercialización (los productores no liquidan, sino que comercializan para que luego la exportación venda al mundo y liquide las divisas), vale la pena aclarar que los números mencionados son posibles gracias a que los productores propiciaron un mejor ritmo de ventas, que se correspondió con una mayor molienda de soja y mayor exportación de harina y aceites.
Pero ese no es el punto central de la discusión. Una fuente consultada por Ámbito en el sector productivo de Córdoba, criticó los dichos del jefe de gabinete y aseguró que “se trata de distintas miradas y modelos productivos, porque el desafío es transformar los granos en las zonas alejadas de los puertos”. Este punto Córdoba “lo vio” hace tiempo, porque cuando un grano de maíz se transforma en carne o en biocombustible, se multiplica la riqueza y se genera empleo local y genuino. Son miradas distintas, por eso se pide tanto la quita de retenciones, para que se puedan realizar inversiones y agregar valor en origen”.
Los dichos de Francos obedecen quizá a que al Gobierno nacional le importa mucho que se vendan los granos, porque tiene asegurado el ingreso por retenciones -independientemente de los que ocurra con la rentabilidad del productor- pero a las empresas que invirtieron, como por ejemplo las del cluster bioenergético, les sirve que las materias primas se transforme en origen.
Todo el sector agropecuario busca lograr una mayor producción, pero hay distintos modelos y el de Córdoba es es de buscar la mayor transformación posible. En realidad, si hay maíz en un silobolsa es probable que el sorprendido sea Francos, pero no habrá productores e industriales cordobeses preocupados, porque no están desesperados por que ese maíz se venda al exterior como grano, sino por transformarlo y agregarle valor en origen.
- Temas
- Guillermo Francos
- Campo
Dejá tu comentario