Trabajadores del Hospital Garrahan se movilizarán contra "el desfinanciamiento del sistema público de salud"

Trabajadores del hospital pediátrico se concentrarán este jueves en el Ministerio de Salud y marcharán hasta Plaza de Mayo.

Trabajadores del Garrahan preparan una nueva movilización.

El Ministerio de Salud inició un proceso de reestructuración desde el 2025. Al cierre de organismos le sumó el despido de personal en instituciones de referencias y desfinanciamiento de programas de distribución de medicamentos. En ese marco, trabajadores del Hospital Garrahan encabezarán una movilización el jueves 27 de febrero.

Se trata de la cuarta movilización de los trabajadores de la institución, luego de una marcha de velas que se realizó en noviembre del año pasado. Al igual que el Garrahan, otros hospitales de alcance nacional definieron medidas de fuerza en los últimos meses en reclamo de los despidos contra su personal: el Posadas -de alta complejidad-, el Sommer -especializado en lepra- y el Laura Bonaparte -de salud mental-.

La medida prepara una concentración a las 15 horas en el Ministerio de Salud para que una hora después inicie una movilización a la Plaza de Mayo. A la convocatoria de las cuatro instituciones más afectadas, se le sumó la del propio organismo sanitario nacional, en donde también se anunciaron despedidos.

La última movilización de trabajadores de salud pasó por el microcentro porteño.

@Cele_Fierro

Trabajadores del Hospital Garrahan

Desde la Junta Interna de ATE del Hospital Garrahan, apuntaron contra el ministro de Salud, Mario Lugones, quien señaló que pese a los despedidos en la institución "el hospital opera con total normalidad y tanto el presupuesto para el funcionamiento, como la provisión de insumos están garantizados y asegurados".

"La realidad es la que denuncian los usuarios del sistema: demoras y faltantes que se pagan en dolor y hasta vidas", señaló Alejandro Lipcovich, secretario general de ATE del hospital, quien apuntó que "los despidos y recortes son brutales y no tienen vínculo alguno con ninguna eficiencia. Solo pretende cerrar, precarizar y dejar sin atención a miles de personas”.

Asimismo, planteó que en el Garrahan “se está dando por una sangría creciente de trabajadoras y trabajadores. Abarca a profesionales de altísima calificación, cuyo reemplazo es virtualmente imposible. Pero también a compañeras y compañeros de otros oficios, que se retiran bajo el peso de malos salarios y condiciones laborales".