22 de noviembre 2024 - 11:55

Charlas de quincho: Pluna, timing político y el balotaje del voto a voto

El embargo y el pedido de indemnidad de Larah generó malestar en el gobierno, que lee intencionalidad financiera en medio de la incertidumbre electoral.

El caso Pluna resurgió sorpresivamente en la última etapa de la campaña para el balotaje 2024.

El caso Pluna resurgió sorpresivamente en la última etapa de la campaña para el balotaje 2024.

El caso Pluna volvió a emerger en la discusión pública, luego de que el estudio Ferrere Abogados, que representa a la empresa Larah (propietaria de acciones de la malograda compañía) pidiera al Poder Ejecutivo que presente un planteo de indemnidad a los ex socios (Campiani y otros), que aún tienen abierta una causa en la justicia por administración fraudulenta. El gobierno lo rechazó y, a las pocas horas, se anunció que la compañía panameña pidió el embargo de los activos uruguayos en Luxemburgo. Esto no se comprobó.

El estudio y el gobierno venían negociando la forma de pago de los 56 millones de dólares a los que el Ciadi (tribunal del Banco Mundial) condenó a Uruguay a pagar, por el cierre de Pluna y la afectación a sus accionistas. El acuerdo ya era un hecho, pero el jueves de la semana pasada, Ferrere condicionó la firma a que el gobierno hiciera un pedido formal en la justicia para dar indemnidad a los acusados (que están procesados por el Código anterior y no tienen aún sentencia). La indignación en Torre Ejecutiva fue grande. “Está reñido con las reglas básicas de la buena praxis legal y -además- pasa por arriba de la separación de poderes, entre otras cosas”, comentó una abogada que representa al Estado uruguayo. “Me llama la atención que Ferrere juegue tan a fondo, cuando un exsocio tiene probabilidades de ser el próximo ministro de Economía”, agregó.

En círculos políticos hubo intensas especulaciones acerca de una intencionalidad. “¡Qué timing, eh!?”, exclamó un corredor de bolsa que venía siguiendo el asunto, preocupado por su impacto en los mercados. “La verdad, los mercados ni se enteraron”, comentó otro operador financiero. “Es un monto menor comparado con el monto global de la deuda uruguaya y -además- los bonos, una vez que se emiten, son propiedad de los inversores”, explicó. Algunos operadores, sin embargo, no descartan alguna dificultad por el entuerto.

“Lo que queda claro -dijo la abogada- es que Campiani, Leadgate y Larah, son parte de lo mismo (...), si alguna duda quedaba. Lo que hay que aclarar es que una cosa es la forma improcedente con la que el gobierno de Mujica cerró la empresa; por eso el fallo en contra, a pesar de que pedían más de 800 millones de dólares y obtuvieron solo 56 millones”, remarcó. “Otra cosa es la responsabilidad penal por fraude; y una cosa no quita la otra”, remarcó. Ferrere introdujo el fallo del Ciadi como prueba de inocencia de Campiani y sus socios, pero la justicia nada ha resuelto aún. Mientras, la calificadora canadiense Morningstar DRBS mantuvo el grado inversor a la deuda uruguaya. Sin novedades en el frente financiero.

Paridad

La tensión en los comandos de campaña de Yamandú Orsi y Álvaro Delgado es máxima. Las últimas encuestas han mostrado mucha paridad en la intención de voto hacia el balotaje, aunque en todas Orsi lleva la delantera. Pero la diferencia está siempre dentro del margen de error y en el entorno de Delgado sostienen la expectativa de que habrá un vuelco final de votos al oficialismo.

Las últimas horas incluyeron los actos finales de campaña y declaraciones cruzadas a varios niveles. Y con la participación -siempre destacada- del expresidente José Mujica, que insultó al presidente Luis Lacalle Pou, luego se disculpó (pero no tanto); antes había dicho que Blanca Rodríguez era un “repuesto” por si Carolina Cosse no agarraba la candidatura a vice. En el oficialismo se rasgaron las vestiduras (con una esperable dosis de exageración) y el “Pacha” Sanchez se preguntó “¿Qué quieren, que se deconstruya?”, para defender a su veterano líder.

Tanto Delgado como Orsi esbozaron planteos de acercamiento mutuo en los últimos días, pero el tono de fondo de la campaña no ha sido particularmente amigable. “Esto es política e implica una lucha por el poder, más allá de la voluntad transformadora de unos y otros… no le pidamos peras al olmo”, reflexionó un politólogo con varias elecciones encima. “Está muy parejo y casi todas las encuestas dan paridad, con diferencias a favor de Orsi que están en el margen de error”.

Negocios

Más allá de la incertidumbre electoral, la vida sigue y los negocios también. Si no, preguntarle a la gente de Enjoy Punta del Este, que se prepara para una gran temporada. De hecho, la actividad en los últimos meses ha estado por encima de las expectativas. Es que Uruguay es un lugar ideal para encuentros de negocios y como muestra vale destacar uno vinculado a la industria petrolera, que se desarrolló en dicho hotel en los últimos días.

Los uruguayos que participaron destacan que sus colegas llegados de otros países quedan asombrados por la tranquilidad y seguridad. “Habitualmente son reuniones cerradas, con controles muy estrictos; fijate que se hacen negocios por millones de dólares”, comentó un jerarca de Ancap. “Y, sin embargo, el clima era de mucha tranquilidad, discreto. Es un capital que no podemos perder”, advirtió.

Último lanzamiento

Un aire de despedida se sintió en la Plaza de Toros de San Carlos en Colonia durante el lanzamiento de la temporada 2024-2025. El presidente Lacalle Pou llegó temprano en esta oportunidad, con las brasas recién encendidas en los stands de los departamentos, y no dejó a nadie con ganas de saludarlo o tomarse una selfie. "Es mi último lanzamiento y ha sido de mis eventos favoritos todos estos años", dijo.

El evento fue una verdadera celebración del turismo, con mucha complicidad entre los diferentes actores del sector en lo que se sintió como un fin de ciclo. A diferencia de ediciones anteriores, luego del acto formal, siguió el festejo para los representantes de todos los departamentos del Uruguay al ritmo de la Sinfónica de Colonia, que tocó varios temas populares. Nadie se quedó con ganas de bailar, incluso el intendente Carlos Moreira, se sumó a la pista mientras se escuchaba un candombe. Fue una absoluta fiesta.

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