El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este sábado una orden que impone nuevos aranceles del 25% a los productos de México y Canadá, y del 10% a las importaciones de China, lo que podría interrumpir más de 2,1 billones de dólares en comercio anual.
Donald Trump impuso aranceles para China, México y Canadá, y se vislumbra una nueva guerra comercial
El presidente de EEUU gravó con 25% a las importaciones desde sus vecinos y con un 10% a las adquisiciones chinas.
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El dólar global subió por la nueva amenaza de que Donald Trump aumente aranceles a Canadá y México
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El petróleo cerró con una nueva baja semanal por las presiones de la política arancelaria estadounidense
La decisión de Trump podría interrumpir más de 2,1 billones de dólares en comercio anual.
Trump, quien trabaja desde su propiedad de Mar-a-Lago en Florida este fin de semana, dijo el viernes que era poco lo que los tres principales socios comerciales de Estados Unidos podían hacer para evitar los aranceles.
Una hoja informativa de la Casa Blanca sobre los aranceles decía que permanecerían vigentes "hasta que se aliviara la crisis", pero no brindaba detalles sobre qué acciones tendrían que tomar los tres países para obtener una prórroga.
Según la orden escrita de Trump, la recaudación de aranceles comenzará el martes. Pero las importaciones que se cargaron en un buque o en su modo de tránsito final antes de ingresar a Estados Unidos antes de las 12:01 am del sábado estarán exentas de los aranceles.
Una medida largamente anunciada
Este sábado había sido establecido como fecha límite para presionar a México, Canadá y China para tomar medidas que detengan el flujo de fentanilo y productos químicos precursores a Estados Unidos, así como para impedir que inmigrantes ilegales crucen las fronteras sur y norte.
Trump, no obstante, descartó la idea de que sus amenazas arancelarias fueran simplemente herramientas de negociación. "No, no es así. Tenemos grandes déficits con los tres", dijo a la prensa, informó Reuters.
Sin embargo, el presidente estadounidense hizo referencia a una posible exención para el petróleo de Canadá, diciendo que la tasa arancelaria sería del 10% frente al 25% previsto para otras importaciones canadienses. Pero indicó que a mediados de febrero se aplicarían aranceles más amplios al petróleo y al gas natural, comentarios que hicieron subir los precios del crudo.
El petróleo crudo es la principal importación de Estados Unidos desde Canadá y alcanzará casi 100.000 millones de dólares en 2023, según datos de la Oficina del Censo de Estados Unidos.
Costos más altos para los consumidores en EEUU
Trump reconoció que los aranceles podrían dar lugar a mayores costos transferidos a los consumidores y que sus acciones podrían causar perturbaciones en el corto plazo, pero dijo que no le preocupaba su impacto en los mercados financieros.
Jake Colvin, presidente del Consejo Nacional de Comercio Exterior, que representa a las principales empresas estadounidenses en asuntos comerciales, dijo que imponer aranceles a los principales socios comerciales de Estados Unidos "podría afectar el costo y la disponibilidad de todo, desde paltas hasta aires acondicionados y automóviles, y corre el riesgo de desviar el foco de nuestras relaciones del diálogo constructivo".
Aunque Trump habla de “cobrar” aranceles a otras naciones, éstos los pagan las empresas importadoras y en ocasiones se trasladan a los consumidores.
Los fabricantes de automóviles se verían especialmente afectados por el aumento de los costos, a través de los aranceles sobre los vehículos ensamblados en Canadá y México. Su vasta cadena de suministro regional, donde los componentes pueden cruzar las fronteras varias veces antes del ensamblaje final, exacerbaría aún más estos costos.
Y Trump dijo que vendrán más aranceles, diciendo que se estaban considerando impuestos a las importaciones de bienes europeos, así como al acero, aluminio y cobre, y a medicamentos y semiconductores.
EEUU aguarda represalias
Se espera que la medida de Trump genere aranceles de represalia, lo que podría interrumpir más de 2,1 billones de dólares en comercio bilateral anual de Estados Unidos con China, México y Canadá.
Canadá ha establecido objetivos detallados para una represalia arancelaria inmediata, incluidos aranceles al jugo de naranja de Florida, dijo una fuente familiarizada con el plan a Reuters. La lista más amplia de objetivos podría alcanzar 150.000 millones de dólares canadienses (103.000 millones de dólares) en importaciones estadounidenses, pero se realizarían consultas públicas antes de actuar.
La presidenta mexicana, Claudia Sheinbaum, también amenazó con tomar represalias, pero dijo que "esperaría con la cabeza fría" la decisión arancelaria de Trump y que estaba preparada para continuar un diálogo fronterizo con él.
China ha sido más cautelosa sobre sus planes de respuesta, pero ha prometido defender sus intereses comerciales. Pekín "se opone firmemente" a las nuevas obligaciones de Trump, dijo un vocero de la embajada china en Washington, y agregó: "No hay ningún ganador en una guerra comercial o una guerra arancelaria, que no sirve a los intereses de ninguna de las partes ni del mundo".
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