En 2002, Sebastián Valles estaba a punto de emigrar debido a la crisis económica que azotaba al país. Sin embargo, un local en una esquina de Palermo lo cautivó y lo llevó a cambiar sus planes. Así nació La Dorita, una parrilla que rinde homenaje a su madre y que desde entonces se ha consolidado como un referente de la gastronomía argentina. Con dos sucursales en Palermo y una reciente apertura en Madrid, La Dorita lleva la tradición de la carne asada a nuevas latitudes, manteniendo su esencia y calidad inalterables.
La parrilla porteña que se afianza como un referente para los amantes de la buena carne
Con casi 23 años de tradición, La Dorita sigue creciendo y hasta suma una sucursal en España.
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La decoración de los locales es un reflejo del espíritu argentino. Diseñada por Paula Gallegos, esposa de Sebastián, sus paredes están llenas de arte, incluyendo murales de Marcos López, fotografías de iconos nacionales y detalles que evocan la argentinidad, como los pingüinos para vino y un altar al Gauchito Gil. Las mesas de madera rústica y las lámparas hechas con botellas crean un ambiente cálido y acogedor, ideal para ir en familia o con amigos.
La propuesta gastronómica de La Dorita se centra en la calidad de sus carnes de pastura, provenientes de novillos pesados, criados en condiciones óptimas. Las parrilladas son el alma del menú, con cortes como bife de chorizo, entraña y matambrito de cerdo, servidos en fuentes de hierro caliente.
Además, cuenta con opciones como empanadas de carne cortada a cuchillo, tortilla de papas con corazón de provolone, pastas caseras -como raviolones de lomo- y postres tradicionales, entre ellos el flan casero, el vigilante y el panqueque de dulce de leche Chimbote. La selección de vinos incluye etiquetas de las mejores bodegas argentinas, ideales para acompañar cada plato.
Con su combinación de tradición y calidez, La Dorita es un lugar recomendado para celebrar momentos especiales con seres queridos, disfrutando de una experiencia culinaria que captura la esencia de Argentina.
Direcciones: Humboldt 1892; Bulnes 2593, Palermo.
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